Death Cab For Cutie – Codes And Keys

Death Cab For Cutie tienen la difícil papeleta de superar el nº 1 que consiguieron en Estados Unidos con su anterior álbum. Y es que la banda de Ben Gibbard ha ido creciendo disco a disco, hasta convertirse en una de las bandas más exitosas del indie-rock americano, y en una referencia para otros grupos. También es cierto que han pasado ocho años desde que sacaron su mejor disco, aquel enorme Transatlanticism, y que desde entonces su frescura, y su calidad, han ido bajando trabajo a trabajo. Bueno, pues la cosa sigue más o menos igual en este octavo álbum.

Codes And Keys no es un mal disco, todo lo contrario. En su conjunto, puede ser un álbum muy disfrutable, y la verdad es que no se hace nada pesado ni aburrido. Lo malo es que para mi gusto se les ha ido la mano en la producción: Alan Moulder les ha hecho una producción muy suya, donde hay miles de capas en cada canción, y demasiados teclados. Absolutamente todas las canciones están maquilladas en exceso, y da la sensación de que hay un abismo entre lo que se grabó en el estudio, y el resultado final. Supongo que por eso me quedo con Codes And Keys, Underneath The Sycamore o Monday Morning, que son las canciones menos trabajadas y más Death Cab For Cutie. Aunque tengo que reconocer que si no me fijo mucho en lo que comentaba antes, temas como You’re a Tourist, Doors Unlocked And Open o St. Peter’s Cathedral, me parecen realmente buenos.

7,5