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Décimo aniversario del aterrizaje de Curiosity

Por Cosmonoticias @Cosmo_Noticias
Décimo aniversario del aterrizaje de Curiosity

Póster de conmemoración de los 10 años de aterrizaje de Curiosity en Marte. Crédito: NASA/JPL-Caltech.

Hace 10 años, el 5 de agosto de 2012, un sistema de aterrizaje descendió el rover Curiosity de la NASA hasta el Planeta Rojo, dando comienzo a su búsqueda de evidencia de que, hace miles de millones de años, Marte tuvo las condiciones necesarias para albergar vida microscópica.

Desde entonces, Curiosity ha recorrido casi 29 kilómetros y ascendido 625 metros a medida que explora el cráter Gale y la ladera del monte Sharp en su interior. El rover ha analizado 41 rocas y muestras de suelo gracias a un conjunto de instrumentos científicos para aprender lo que revelan sobre el planeta hermano de la Tierra. Y empujó a un equipo de ingenieros a idear maneras de minimizar el desgaste y mantener al rover en movimiento: de hecho, la misión de Curiosity fue recientemente extendida por otros tres años, permitiendo que continúe entre la flota de importantes misiones astrobiológicas de la NASA.

Abundancia de ciencia

Ha sido una década ocupada. Curiosity ha estudiado el cielo de Marte, capturando imágenes de nubes brillantes y de las lunas. El sensor de radiación del rover permite que los científicos midan la cantidad de radiación de alta energía a la que estarían expuestos los futuros astronautas en la superficie marciana, ayudando a la NASA a descubrir cómo mantenerlos a salvo.

Pero lo más importante, Curiosity ha determinado que tanto el agua líquida como los componentes químicos y nutrientes necesarios para albergar vida estuvieron presentes por al menos decenas de millones de años en el cráter Gale. El cráter alguna vez contuvo un lago, cuyo tamaño aumentó y disminuyó con el paso del tiempo. Cada capa más alta en el monte Sharp sirve como registro de una era más reciente del ambiente de Marte.

Ahora, el intrépido rover está viajando hacia un cañón que marca la transición a una nueva región que se piensa que se formó cuando el agua se estaba secando, dejando atrás minerales salados llamados sulfatos.

“Estamos viendo evidencia de cambios dramáticos en el clima marciano antiguo”, dijo Ashwin Vasavada, científico del proyecto de Curiosity en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA. “La pregunta ahora es si las condiciones habitables que Curiosity ha encontrado hasta ahora persistieron a lo largo de estos cambios. ¿Desaparecieron, nunca regresaron, o vinieron y se fueron durante millones de años?”.

Curiosity ha progresado sorprendentemente en la montaña. En 2015, el equipo capturó una imagen de “postal” de colinas lejanas. Un pequeño punto dentro de esta imagen es una roca del tamaño de Curiosity apodada “Ilha Novo Destino” y, casi siete años después, el rover pasó junto a ella el mes pasado en su camino hacia la nueva región.

Décimo aniversario del aterrizaje de Curiosity

Escena capturada por Curiosity el 9 de septiembre de 2015, a kilómetros de su posición actual. El círculo indica la ubicación de una roca que el rover pasó recientemente. Crédito: NASA/JPL-Caltech.

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Escena capturada por Curiosity el 9 de septiembre de 2015, a kilómetros de su posición actual. El círculo indica la ubicación de una roca que el rover pasó recientemente. Crédito: NASA/JPL-Caltech.

El equipo planea pasar los próximos años explorando el área rica en sulfatos. Allí, tienen objetivos en mente como el canal Gediz Vallis, que podría haberse formado durante una inundación hacia el final de la historia en el monte Sharp, y grandes fracturas cimentadas que muestran los efectos del agua subterránea más arriba en la montaña.

Cómo mantener un rover en marcha

¿Cuál es el secreto de Curiosity para mantener un estilo de vida activo a la madura edad de 10 años? Un equipo de cientos de ingenieros dedicados, por supuesto, trabajando presencialmente en JPL y de manera remota desde casa.

Catalogan todas y cada una de las grietas en las ruedas, prueban cada de línea de código informático antes de enviarlas al espacio, y perforan un sinfín de muestras de roca en JPL, asegurándose que Curiosity pueda hacer lo mismo de manera segura.

“Tan pronto como aterrizas en Marte, todo lo que haces está basado en el hecho de que no hay nadie cerca para repararlo en 60 millones de kilómetros”, dijo Andy Mishkin, director de proyecto de Curiosity en JPL. “Se trata de hacer un uso inteligente de lo que ya está en tu rover”.

El proceso de perforación robótica de Curiosity, por ejemplo, ha sido reinventado múltiples veces desde el aterrizaje. En un punto, el taladro estuvo fuera de servicio durante más de un año, ya que los ingenieros rediseñaron su uso para ser más parecido a un taladro de mano. Más recientemente, un conjunto de mecanismos de frenado que permiten al brazo robótico moverse o mantenerse en un lugar, dejó de funcionar. Aunque el brazo había estado operando normalmente debido a que los ingenieros agregaron un conjunto de repuestos, el equipo también ha aprendido a excavar más cuidadosamente para preservar los nuevos frenos.

Para minimizar el daño a las ruedas, los ingenieros mantienen un ojo en los lugares peligrosos como un terreno afilado que descubrieron recientemente, y desarrollaron un algoritmo de control de tracción para ayudar.

El equipo ha adoptado un enfoque similar para controlar la energía del rover que disminuye lentamente. Curiosity depende de una batería de energía nuclear de larga duración en lugar de paneles solares para mantenerse en movimiento. A medida que los gránulos de plutonio en la batería decaen, generan calor que el rover convierte en energía. Debido al decaimiento gradual de los gránulos, el rover no puede hacer tantas cosas en un día como lo hacía durante su primer año.

Mishkin dijo que el equipo continúa presupuestando cuánta energía usa Curiosity cada día, y ha descubierto cuáles actividades pueden hacerse en paralelo para optimizar la energía disponible para el rover. “Curiosity definitivamente está haciendo más multitarea donde es seguro hacerlo”, añadió Mishkin.

A través de una cuidadosa planificación y trucos de ingeniería, el equipo tiene todas las expectativas de que el intrépido rover aún tenga años de exploración por delante.

Fuente: NASA Mars Exploration


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