Como en cualquier estancia,
elige un foco y agrupa otros elementos en torno a éste. El foco puede ser el material del suelo -baldosa hidráulica, madera...-, la pared -el color, el estampado del papel...-, la iluminación -una gran lámpara, bañadores de pared...-, o algún elemento práctico -almacenaje, silla o banco, alfombra...-. Luego el arte está en saber componer y mezclar objetos y estilos. La idea es no recargar el pasillo para hacerlo confortable. Si es amplio aprovecha para poner armarios empotrados ocultos o una consola.Esto es muy practico para dejar los abrigos en el hall de entrada. Si es estrecho elige tonos neutros y claros para la pared, iluminalo bien, sobretodo en los extremos y evita los espejos grandes. Si es demasiado largo intenta dividirlo visualmente colocando varias alfombras. Si es un pasillo pequeño, simplemente un distribuidor, coloca una lámpara potente y llamativa
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