Escribo esto por una enorme lección que acabo de pasar, ya que hace dos años pude evitar un terrible acontecimiento actual pero lo fui dejando y todo por la cómoda y mala decisión de “Dejar lo importante por hacer lo urgente”.
Además, últimamente la falta de concentración ha predominado en mí. ¿Estaré loca y no me había dando cuenta?, ¿Un extraterrestre secuestró mi cerebro? Definitivamente no, simplemente somos algo despistados y te dirán que obviamente olvidas lo que no tiene importancia pero, ¿Siempre tiene que ser así?
¡Bajemos de esa nube, nos esperan en la tierra!
Y repito… “NO DEJES LO IMPORTANTE POR HACER LO URGENTE”.
Organízate.
En la actualidad prácticamente cualquier cosa es una distracción: amigos, familia, estudios, trabajo… Hablo de las situaciones que preocupan nuestra mente ya que no somos capaces de afrontar todo y mientras hacemos una cosa pensamos en la que hemos dejado de hacer o no hemos empezado, y al final no nos centramos en nada.
Realiza una lista de metas por día, reservando una o dos actividades que te motiven mucho, procurando que no sean más de 10.
A primera hora lo importante.
Quítate las actividades más aburridas y frustrantes primero. ¿No se siente bien liberarte de eso que tanto piensas? Lograrás mejorar tu capacidad de atención para aprovecharla durante horas después.
Mastica chicle.
Regularmente cuando estamos realizando algo que es aburrido y monótono tendemos a comer, haciéndolo como vía de escape y cuando nos damos cuenta ya perdimos la concentración. Al mascar sólo un chicle en vez de un bocado tras bocado, ayudará a que te concentres en lo que haces aprovechando mejor el tiempo.
Resiste a las tentaciones.
Sabemos a que me refiero, los dispositivos móviles. Con sólo echar un vistazo a las redes sociales ya estás atrapado, lo mejor es desconectarlas por una o dos horas o aunque sea ponerlas en silencio para que poco a poco las vibraciones del celular no sean tu prioridad.
Lo que también puedo decir es que no somos perfectos y siempre existen factores fuera de nuestro control, así que pongamos todo nuestro esfuerzo en mejorar pero no nos atormentemos por situaciones que no podemos cambiar, todo al final encuentra su solución.