Llevo unos cuantos días leyendo artículos en importantes periódicos españoles que informan que está siendo un invierno extraño a causa del calentamiento global, ya que llueve muy poco en Groenlandia.
Por un lado, las altas presiones en Escandinavia provocan una dismunución pluviométrica en esa zona y sus alrededores. Por otro lado, y con colaboración de este anticiclón escandinavo, el frío intenso del círculo polar ártico se cuela por latitudes más bajas, y acaba penetrando por la Europa del este, se pasea por el centro de Europa y llega en ocasiones hasta la parte más occidental del Mediterráneo. Esto provoca nevadas y temperaturas gélidas en muchas de las zonas anteriormente citadas.
Pongamos un ejemplo de la poca lluvia en puntos de Escandinavia. La media pluviométrica en Oslo durante el mes de enero se sitúa alrededor de los 50mm, pero a día de hoy (20 de enero) sólo llevaban 4,4mm. Y un ejemplo de temperaturas en la península: en Cadaquès hemos tenido 10 días seguidos sin superar los 7,9ºC, fenómeno que se da cada 5-10 años. Hasta aquí nada raro, ¿no? Los periódicos dicen lo que está pasando.
La IPCC, fuente número uno de los periodistas que escribían este tipo de artículos y que tanto alaban, comunicaba en uno de sus informes que Escandinavia será la zona más lluviosa, y la zona mediterránea, la más seca (-20/-40%). Por ahora, sus estudios no son muy correctos. No quiero que ahora digáis "pero esto es meteorología, tiempo presente, y lo otro es climatología…". No hace falta decir que van muy atados estos dos términos y ya sabéis a dónde quiero ir con lo que explico.
Gerard Maymo (entrevistado la semana pasada) explicaba que M. Mann ha cobrado del gobierno de Estados Unidos 550.000 dólares para continuar sus estudios cientificos… ¡después de la ser uno de los principales acusados en la trama del Climategate! Aunque le cambiara el nombre; en vez de Climategate lo llamaría... Clima A.
Cada vez esto se parece más al famoso caso de la gripe A: exageración + miedo = dinero. Al final la gripe ha sido un mal menor, pero por otro lado, para los bolsillos de las farmacéuticas, un bien mayor.
Para acabar, me gustaría recomendar un libro que he empezado a leer, de Miguel Delibes y su hijo Miguel Delibes de Castro, llamado La tierra herida. "¿Qué mundo heredarán nuestros hijos?". Cuando se habla de hijos/niños de por medio, no me gusta mucho, pero pese a ser de un punto de vista diferente del mío, es muy interesante el libro.
Y ahora sí, adiós. Y por favor, no os olvidéis de colaborar con Haití.