Estudio halla que la edad de inicio de la alimentación sólida, influye en el IMC en la adultez
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y a la Academia de Pedriatría de Estados Unidos, los bebés deberían ser alimentados exclusivamente con lactancia materna durante los primeros seis meses de vida, sin embargo, muchos padres comienzan a darles alimentos sólidos antes de este tiempo.
Un estudio dirigido por la doctora Kim Fleischer Michaelson, de la Universidad de Copenhague, encontró que “cuanto más se le demora la alimentación complementaria a un bebé, entre los 2 y 6 meses, menos riesgo tendrá de ser un adulto obeso”.
Aunque lo mejor es esperar hasta que el bebé tenga 6 meses para iniciar la alimentación sólida, algunos podrían necesitar alimentos complementarios antes de los seis meses, pero no deberían ingerirlos antes de los 4 meses de edad, opinan expertos.
Si bien es cierto existen algunos estudios que han sugerido que la lactancia protegería de la obesidad, los datos aún no son concluyentes.
En la presente investigación, el equipo de Michaelson estudió una muestra de 5.068 hombres y mujeres nacidos en Copenhague entre 1959 y 1961. En ese momento, a los padres se les indicaba iniciar la alimentación sólida de un bebé entre los 4 y 6 meses de edad, pero muchos también comenzaban antes.
La mitad de los participantes había recibido lactancia exclusiva por lo menos hasta los 2 meses y medio y la otra mitad había empezado a comer alimentos sólidos a partir de los 3 meses y medio. El 17 por ciento de los bebés empezaron a ser alimentados con cuchara antes de los 2 meses de edad y el 46 por ciento, a los 4 meses o más.
Al año de vida, los bebés que habían tomado leche materna por más tiempo tenían índices de masa corporal (IMC) más bajos. El IMC es un indicador que relaciona el peso con la altura y mide el nivel de obesidad de una persona. Pero no hubo relación entre la duración de la lactancia y el IMC en la niñez, la adolescencia o la adultez.
El equipo encontró que la edad de inicio de la alimentación sólida, habría influido en el IMC en la adultez. Según señaló la Dra. Michaelson, “el riesgo de tener sobrepeso a los 42 años disminuyó entre un 5 y un 10 por ciento por cada mes de demora en el inicio de la alimentación complementaria”.
Via. salud.com