Desconexión - Neal Shusterman

¿Qué harías si decidieran desconectarte? Connor, Risa y Lev tal vez consigan escapar..., pero ¿sobrevivirán?Tres vidas distintas. Una ley implacable. Un único final. Solo si llegan a los dieciocho podrán evitarlo.La Segunda Guerra Civil de Estados Unidos, también conocida como «Guerra Interna», fue un conflicto prolongado y sangriento que concluyó con una resolución escalofriante: la vida humana se considerará inviolable desde el momento de la concepción hasta que el niño cumpla los trece años, entre los trece y los dieciocho años de edad, sin embargo, los padres pueden decidir «abortar» a su hijo de modo retroactivo... con la condición de que el hijo, desde un punto de vista técnico, no muera. Al proceso por el cual se acaba con él al mismo tiempo que se le conserva con vida se le llama «desconexión». Actualmente, la desconexión es una práctica frecuente y socialmente aceptada.

Hoy vengo con una distopía. La conocí gracias al grupo de whatsap, en el que Lesincele y alguien más, que ya no recuerdo quién jajaja, estuvieron hablando del libro y me picaron mucho la curiosidad y gracias a la editorial he tenido el placer de disfrutar de la lectura de Desconexión.
Como en toda distopía tenemos una sociedad que en un primer momento podemos catalogarla como distinta a la que tenemos hoy en día, pero luego reflexionando te das cuenta que no lo es tanto. Tras una guerra, a la que llaman Guerra Interna, todos los aliados, enemigos y neutros ofrecieron un tratado que fue aceptado por todos. En este tratado había unas normas que debían ser seguidas por todos. En el Tratado Vital que así se llama, se establecen dos pautas importantes: que la vida hasta los 13 años era inviolable, pero que una vez llegado a los 13 y hasta los 18 años, que se establece la edad adulta, tus padres pueden “abortarte”, pero de una manera simbólica… no te mataban, no técnicamente, lo que te hacían era la llamada Desconexión. Seguías estando vivo, pero técnicamente ya no existías siendo TÚ, ese TÚ estaba muerto, pero el alma, seguía viviendo.
Dejando claro el tema tan de actualidad como nos quiere dar este libro conoceremos a los tres protagonistas de la historia: Connor, Risa y Lev. Cada uno con su historia, tan distinta entre ellos, pero que tienen en común algo muy importante: todos van a  ser desconectados, unos de forma voluntaria y otros forzados.
La forma en la que se encuentran todos es absolutamente asombrosa. No os voy a contar el suceso en sí, solo diré que no podía creerme que tan al principio pasara tanta acción junta. Después de esto, viviremos muchas aventuras junto con los tres protagonistas principales. Es verdad que en ciertos momentos, no estarán auténticamente juntos, harán cada uno su vida. Pero todos y de forma cada uno distinta intentaran luchar para sobrevivir y seguir viviendo su vida. Y de una forma sorprendente quedarán unidos para siempre.
Los personajes son unos auténticos héroes. Cada uno tiene su historia, su vida y sus distintas visiones de la vida. Quizás eso sea lo que más le separa, pero a la misma vez es lo que más les une. Lev es un personaje que quizás al principio no entendamos nada de su visión de la vida, pero a lo largo de la historia te vas dando cuenta que con tanto solo 13 años tiene que experimentar un cambio tan inmenso que ninguno podríamos soportar. De los personajes que menos me gustaron, pero que inmediatamente te das cuenta que es el más importante y el más honesto y sensible. Connor es el líder de la manada; el protector de todos, el padre de los tres. Quiere proteger a todos a pesar de que nadie se lo ha pedido, y esa losa lo atormentará toda la vida. Risa, la chica perfecta; quizás sea el final lo que me haya asombrado más, la más valiente y madura de los tres, claramente. Hay un cuarto personaje… que es mi personaje favorito, que sale en apenas unos capítulos, pero creo que se hace de querer inmediatamente: Cyrus-Tyler, una persona totalmente perdida en sí misma, pero que intenta salir adelante. Creo que es el personaje de toda la historia, quién haya leído el libro se dará cuenta de lo cuán importante que es este chico. A mí me llegó al corazón.
La narración esta en tercera persona contada por la visión de los distintos personajes que van saliendo: Connor, Risa, Lev, Cyrus-Tyler, El Almirante… serán capítulos más bien cortos donde veremos alguna que otra vez, una misma acción vista de distintas visiones: Una de las cosas mejor logradas por el autor, nos haremos una perspectiva en 3D de todo lo que va aconteciendo. Con ritmo trepidante en casi todo el libro, con mucho diálogo que le da dinamismo; también hay momentos de descripción donde daremos rienda suelta a nuestra imaginación para ver esta realidad que nos describe este autor.
Antes de terminar, quería reseñar lo grandioso de este libro, no son los personajes, ni son la historia de los personajes, es la historia en si misma que nos cuenta. Para mí, una crítica a la sociedad de hoy en día: nos hace reflexionar en que nos estamos convirtiendo, o lo que podemos llegar a convertirnos: en auténticos roedores de vida y de monstruos. En todo el libro iremos reflexionando sobre lo que en un trasfondo nos quiere ir diciendo: ¿tenemos alma? ¿Cuándo se crea la vida? ¿traemos niños al mundo aunque nadie los quiera, sólo por la prohibición de no abortar? ¿Podemos decidir cuándo podemos destruirla? ¿Por tener dinero vamos a destruir vidas para salvar la tuya propia? Me ha dejado altamente congestionada por lo actual que puede llegar a ser.
En resumen, una distopía en el que el estado y los padres deciden cuando desconectar a los jóvenes. Una historia de superación y supervivencia al límite. Una bonita historia de amistad, amor y pasión por la vida. Una novela juvenil que trata de hacernos llegar un mensaje de reflexión sobre la vida y sobre el mundo que nos podemos llegar a encontrar. Aunque no seas un lector de novelas juveniles, esta es una distopía diferente, en el que te vas sumergiendo en la historia y no paras de seguir leyendo y reflexionando sobre lo que nos quiere transmitir. Una historia audaz, actual e inmensamente buena. Muy muy recomendable.

Gracias a la Editorial Anaya por el ejemplar