Los trastornos neuroconductuales como el trastorno por déficit de atención ( TDA) pueden tener una amplia gama de síntomas y afectar a las personas de manera diferente, lo que significa que no son un diagnóstico en blanco y negro como el cáncer o una enfermedad infecciosa.
Muchos han criticado y afirmado que esta enfermedad no existe y que no es más que una excusa para la pereza o el mal comportamiento, insistiendo en que los síntomas no son reales. Ha habido un gran mal entendido con respecto a esta enfermedad.
Sin embargo, la comprensión de lo que es el TDA y su tratamiento podría estar a punto de cambiar.
Un estudio de colaboración dirigido por Michael Reber de la Universidad de Estrasburgo ha confirmado el origen biológico de la enfermedad. Los resultados se publicaron en un formato abierto en la revista Brain .
El colículo superior se encuentra en el cerebro medio y tiene muchas funciones sensoriales relacionadas con las funciones motoras. Los investigadores introdujeron a un grupo de ratones a una mutación genética que duplicó las conexiones entre la retina y el colículo superior , creando hiperestimulación visual . Aquellos con la mutación tenían también un colículo superior con una acumulación del neurotransmisor noradrenalina , que es la molécula de " lucha o huida " que aumenta la frecuencia cardíaca y prepara el cuerpo para reaccionar a un estímulo.
El TDA tiene una multitud de síntomas, como la impulsividad , falta de atención , la ansiedad y la hiperactividad. Tradicionalmente , estos síntomas han sido controlados con una combinación de terapia , psicoestimulantes , y entrenamiento para evitar los síntomas. Mientras que la medicación ha demostrado que reduce en gran medida los síntomas , ésta viene acompañada de una lista de efectos secundarios, incluyendo nerviosismo, pérdida del apetito, sequedad de boca, y otros.
Este estudio se diferencia de otros sobre el TDA que se centran principalmente en la síntesis y transmisión de la dopamina. Los investigadores continuarán a lo largo de esta línea de estudio en un esfuerzo por comprender mejor la función del exceso de noradrenalina. Este enfoque mas amplio para comprender las causas neurobiológicas del TDA eventualmente podría revolucionar la forma en que se diagnostica y trata la enfermedad. Se podrían desarrollar nuevos medicamentos para hacer frente al problema desde su raíz y con menos efectos secundarios.