Desenfocados

Los grandes desastres se producen casi siempre a causa de un pequeño ‘click’, un detonante puntual, rápido como una escaramuza guerrillera, inesperado como una emboscada y en un lugar exacto y delimitado, como un cortocircuito en un punto concreto de la red, que puede dejar a oscuras a toda una ciudad.

Un desenfoque, no salir bien bien en la foto de familia que escenifica un acuerdo casi siempre sólo de intenciones, no de hechos ni de consecuencias para quienes dicen asumirlo, puede resultar fatal. Estamos desenfocados, como Rajoy en esta imagen del Congreso. Es cuestión de concretar el punto de enfoque sin perder la profundidad de campo necesaria para tener una visión de conjunto. Si el resultado no es el esperado y las medidas propuestas no funcionan, es hora de cambiar el enfoque de la cuestión. El G-20, un experto en fotografía, enfoques, desenfoques, que escribe unos convincentes manuales de usuario, presiona a Merkel. Ésta presiona a Rajoy y éste, a su vez, presiona a los curritos de abajo. Al final, todo va a resultar como en una gran corporación, donde las órdenes s desvirtúan según van bajando por la pirámide jerárquica hasta desenfocarse del todo.