Dónde encontramos el sol del amor que aleja de nuestros corazones el egoísmo y la estrechéz, el cansancio y el endurecimietno, y los enciende con un nuevo ardor?
Implorémonos esa gracia de Cristo.
La gracia de ser nosotros mismos pequeños soles, para nuestro entorno, a fin de que, en nuestro mundo, se despierte nueva vida, en todas partes.
Hna Emilie Engel.