
La obra Piss Christ, que había sido objeto de críticas en las últimas semanas por movimientos religiosos, fue destruida a martillazos, tras la celebración de una manifestación católica. Ayer, en torno a un millar de personas se manifestaron en la ciudad para denunciar el carácter "blasfemo" de la obra.El ministro francés de Cultura, Frédéric.
