Durante los primeros años en la vida de un niño suceden todo tipo de procesos de desarrollo fantásticos en su cuerpo, dado que su organismo se encuentra en permanente desarrollo de sus habilidades y cualidades, por eso los padres deben prestar especial atención a cualquier tipo de problema que pueda presentarse en su evolución natural, tales como las complicaciones auditivas ya que pueden afectar el desarrollo del habla y del lenguaje del niño.
Lo ideal ante cualquier caso es conseguir detectar a tiempo los casos en los que los niños presentan algún problema auditivo, para poder controlarlo cuanto antes y por lo tanto evitar las complicaciones derivadas del caso en relación a su desarrollo personal, social, emocional y cognitivo.
Al respecto la fonoaudióloga Alicia Fernández Zubizarreta, explica:
“la evaluación de la audición puede hacerse desde la primera semana después del nacimiento ya que se utilizan equipos especiales completamente automáticos que permiten conocer la capacidad para oír del bebé sin que el mismo deba responder”…”Estos estudios no provocan ningún tipo de molestia al niño que simplemente tiene que estar quieto en los brazos de su mamá para escuchar unos sonidos durante los minutos que dura esta prueba”.
Son varias las causas que pueden provocar una disminución en la capacidad auditiva de un niño, entre las que encontramos posibles malformaciones congénitas en los oídos, alguna exposición breve a sonidos de impacto repentino o las exposiciones permanentes a sonidos sumamente fuertes que pueden dañar el canal auditivo, lo mismo puede ocurrir en casos en los que los niños sufren infecciones en los oídos que no son bien curadas.
La experta indica que para muchos padres puede resultar difícil identificar que sus hijos tienen un problema de audición ya que por lo general los pequeños aprenden solos a compensar su falta de entendimiento auditivo al poder volverse mucho más receptivos y sensibles a otros mecanismos de lenguaje y señales informativas que encuentra en su entorno, algo que puede entorpecer su desarrollo posteriormente ya que un diagnóstico tardío puede dejar secuelas graves como la sordomudez o el retraso psicomotor.
No podemos dejar de mencionar que los niños con problemas auditivos tienen un mayor riesgo de padecer retrasos en su desarrollo, tanto en su capacidad de hablar como de comunicarse en líneas generales, por eso hay que concretar el diagnóstico lo antes posible, para poder actuar en consecuencia. Los expertos en salud indican que lo mejor es someter a los niños a programas de screening neonatales que tienen el objetivo de identificar problemas auditivos.
Vía | Docsalud
Foto | masochismtango
Enlace permanente:
Detectar a tiempo problemas auditivos en el niño