Muy pocos grupos, tienen el talento de poder llevarnos, a la verdadera esencia del Rock, que se forjaba a últimos de los años sesenta, principios de los setenta. Un Rock que se fusiona con alma, con un espíritu que ni las radios estaban dispuestas a perder el hilo en ningún momento. Los músicos eran lo que eran, unos amantes de una cultura a la que huyeron en cualquier momento de encasillarse en una marca, o en un status que nunca comprendieron. Ese espíritu se puede reflejar en varios grupos hoy en día. Los cuales están muy alejados de como vender su música, sino cómo llegar a transmitirla. Dewolff hoy en día se ha convertido con cinco álbumes en un grupo atemporal, fuera de una moda que nunca quiso estar dentro de una de ellas. Con esa magia de tocar, el talento tan intimista que sacude cualquier convencionalismo, de cualquier venda que te limita, no solo al grupo a componer, sino al público a la hora de degustar su música. Ricamente impredecible, conocida por su elegancia. La esencia del Blues, la personalidad del Rock a través de un Hammond que no dejará títere con cabeza, ese coro de voces femeninas que por desgracia, creo que no van con ellos en los directos. Dewolff es un trío musical que hace 40 años los hubieran convertido en una de las leyendas del Rock, pero ellos son de ahora, disfrutemos de su atemporalidad....