Diálogos en La Estación Intermodal Atemporal
Introducción
Situada aquí, en Terra Mare, famoso balneario que atrae bellezas de las galaxias más lejanas..., se encuentra la famosa Estación Intermodal Atemporal. ¿No la conoce aún?
¡Aquí hay vida salvaje! Los lobos se comen a las ovejas...
¿Se lo quiere perder?
No deje de venir por la E.I.A. (Andamos caninos)
El atún salvaje está estos días de moda entre los gourmets (También tenemos atún domesticado, Soylent Green Plus, procedente de nuestras inmensas granjas, para las clases bajas, los turistas de bocadillo procedentes de los inframundos siderales)
¡¡Vengan!! ¿A qué están esperando? Serán bienvenidos.
(Seguimos caninos, pero igual no se nos nota por ahí fuera)
Aquí hay auténticos genios de la restauración gastronómica. ¿Y se lo quiere perder? Comemos de todo, pues todo lo que corre, nada o vuela ¡es bueno para la cazuela!
¿Conoce usted otro lugar así? Claro que no. Nuestra fama legendaria sobrepasa el Centro Galáctico ¡y más allá!
Tenemos dos tipos de agua: una es natural del planeta y otra nos cayó en un ¡Diluvio Universal! ¿Conoce algo similar?
En este mundo hay pueblos que se beben el agua; primitivos, vale, sí, pero en los civilizados preferimos tomar cerveza, sidra y sobre todo vino. Tenemos vinos ¡fabulosos! De todos los colores, graduaciones, para todas, bueno, casi todas las edades, pues a los niños les damos mosto.
Tenemos hongos, algas, crustáceos, todo tipo de habitantes de los mares y ríos, y vegetales, ¡a machaporrillo! Aves, reptiles, mamíferos, bueno, bueno, la lista es casi inagotable. Comemos de todo. Natural o artificial, a gusto del consumidor. Si le gusta el plástico tenemos cantidades inagotables y de las variedades más impresionantes.
¿A qué espera para venir a conocernos?
¿Le gustan los minerales?
En nuestra E.I.A., tenemos una geología espectacular, todo tipo de minerales naturales más los meteoritos que han ido cayendo por millones de años. Los tenemos incluso radioactivos, y si no los fabricamos con unos cuantos bombazos espectaculares. ¿Conoce otro lugar así?
La lista de hongos en nuestro mundo es millonaria, y seguimos descubriendo más y más. Sí, aquí somos capaces de comérnoslos, pero solo algunos especiales y bien cocinados. (Es lo más aconsejable para no salir despedidos hacia otra galaxia a velocidad supralumínica)
La lista de plantas comestibles no es tan grande pero aquí hay de todo, cosas que no se pueden encontrar más que en lejanos rincones de la galaxia. Y aquí están en los mercados tradicionales, a la vista, listas para su consumo. Aproveche, una mañana de plaza y puede encontrar tal variedad que necesitaría dar dos vueltas a la galaxia para aproximarse.
Yo soy menos de carne que de pescado pero... igual un día... (cuando dejemos de estar caninos) Me doy un homenaje. Acompañado de toda la familia, eso sí, que con unos cachos yo ya me lleno.
¿Por qué no se acerca a conocernos y nos cuenta sus impresiones?
Somos seres cariñosos, inténsamente sentimentales, nacemos poetas, y muy musicales. ¿Le gusta la música? Entre el canto de los pájaros y nuestras creaciones este es el planeta más musical en miles de años luz a la redonda. ¿Aún no nos conoce?
Y nuestra pasión más profunda: la danza. Bailar, danzar hasta que el cuerpo no puede más. Ballets, danzas tradicionales y modernas, ¡de todo! Nacemos para bailar, está en nuestro A.D.N. luminoso y astral. Baile un bolero y su existencia ya nunca será igual. Patoso.
Nos sentimos especialmente orgullosos de nuestros últimos visitantes, comenzando por Madrecita. Quedó especialmente sorprendida por la ciudad de Viena y de Austria en general, y eso que no ha leído a S. Zweig. Como le encantan los gatos y vió abundancia de ellos marchó complacida. Ser buenos, niños, este mundo es una maravilla. Fascinante.
Hay mucha gente maravillosa por ahí fuera, amigos, y en ocasiones nos visitan, transmitiéndonos algo de lo suyo. Pero también hay mucho adolescente problemático, que se apuntan a un bombardeo, literalmente. El último evento en Gaza resultó un fiestón tremendo para muchos de ellos. Terminaron de botellón, tal cual.
Confío en que de vuelta a sus hogares estelares se hayan llevado unos buenos tirones de oreja.
El viejo truco, procede desde los tiempos de la caída del Imperio Romano, de que estamos solos en la galaxia, en el universo entero, les está funcionando de miedo en estos tiempos. Algunos visitantes tienen comportamientos muy crueles, pero básicamente tratan de promover un “comunismo difuso”, de tipo espiritual que vaya impregnando las capas materiales. Nada que ver con aquellos tostones del Materialismo Histórico y Dialéctico; que no se los creyeron ni quienes los escribieron.
La mayoría de los que nos visitan es para disfrutar de nuestras bellezas naturales, incluyendo las humanas, y llevarse bellos recuerdos de sus “vacaciones a lo salvaje”. La E.I.A., es simplemente... especial.
Hay quien viene con todo el paquete turístico pagado de antemano, serán famosos y ¡poderosos! Admirados, envidiados, sus rostros en los principales medios de comunicación. Y los hay que vienen a recoger la basura de los anteriores y después vivir en ranchitos, comunas, y lugares insalubres.
Todos tienen algo que contar, con todos se puede dialogar. ¿Se anima usted a seguir mi ejemplo?
Daniel Paniagua Díez