Siempre es agradable entrar en la obra cuando está el polvo de madera por el aire. No me refiero al polvillo en si, sino que indica que la obra gozará seguramente de una calidez especial al incorporar la madera como material de acabado, bien sea en paramentos o en mobiliario.
Independientemente que sea un trabajo agradecido, no deja de ser un oficio que se debe de tener en cuenta a la hora de la puesta en obra y es por eso que en nuestro particular diario de obra me gustaría hacer una breve reseña de aquellas particularidades que he podido observar.
En general las empresas relacionadas con la madera en España se dividen en mobiliario y estructuras de madera y otros, casi al 50 %, y casi un tercio son autónomos. Es por eso que en muchas ocasiones no se disponen de grandes despliegues técnicos y se sigue manteniendo la artesanía, dentro de la estandarización ya habitual. Los carpinteros suelen entrar en obra cuando esta ya cuenta con estructura, cubierta, envolvente, (salvo que alguna de estas unidades sea de madera) y tienen que convivir con otros oficios simultáneamente.
Aquí uno de los momentos. Como bien es sabido, la madera natural debe de acopiarse en obra. Una curiosidad es que en su adaptación al ambiente interior onde se situará, al secarse humedece otros paramentos. Nos ha llegado a pasar en obra que, debido al acopio de un enlistonado de madera se vio reducida la capacidad de secado del pavimento de hormigón, dejando huella durante varias semanas. De esta manera, si es posible, es bueno poder mover el material acopiado, no solo por la ventilación del mismo, sino por la humedad que puede transmitir a otras unidades de obra.
Enlistonado de pino y entablado de pino cuperizado – fotografía Paula Franjo
La parte sensible del trabajo de la madera llega con el acabado, y su mantenimiento mientras dura la obra, ya que los demás oficios, hasta la propia limpieza de obra pueden causar verdaderos estropicios. El propio proceso del barnizado, debe de cuidarse especialmente de cualquier materia en suspensión, arenillas en los zapatos, etc, cualquier descuido o puerta abierta puede provocar manchas, que obligan a cepillar de nuevo, o incluso llegar a reemplazar elementos.
Solamente hay que tener en cuenta las ñapas frente a los trabajos profesionales, evitando a Pepe Gotera.
Cepillo manual sobre tablero de encofrado – Fotografía de Paula Franjo
Lo más destacable en obra es la buena convivencia entre oficios, los cuales hacen mejorar la calidad de la obra, solamente con su buena relación, haciendo buenos detalles. Es esto quizás lo que le da el plus + de obra completa y cerrada, además del cuidado que pueda prestar cualquier persona de la dirección de obra, especialmente el jefe o encargado de obra.