Días Astralis

¿No recordáis lo que son los días temáticos? Si, seguro que sí. Por si las “flais” os dejo una chuleta para los más despistados.

En esta ocasión nuestros días temáticos van para Astralis (¿Astra-qué? Que si, que Astralis. ¿No lo conocéis? Más motivos para estas jornadas intensivas) una novela que primero fue guión de cine y que tiene mucho que contar y es que de la mano de Antonio J. Bazalo nos sumergimos en un mundo distinto pero muy conocido.

La reseña la tendréis mañana, la entrevista pasado y finalizaremos con un sorteo. Pero ahora os voy a hablar un poquito más del libro y su autor.

Antonio J. Bazalo (Málaga, 1981) ha sentido desde siempre una gran fascinación hacia las culturas antiguas, la astronomía y la tecnología, las cuales han marcado sin duda la historia de Astralis. Comenzó a recibir menciones por su talento como escritor desde que estaba en la escuela y prosiguió con su afición años después en un aula de escritores, a partir de la cual comenzó el proyecto Astralis. Su estilo, sin embargo, bebe más del cine que de la literatura, y de hecho la historia de Alicia comenzó como guión de cine y no como novela. La influencia de directores como Hayao Miyazaki se deja sentir en cada uno de los personajes de este gran relato de aventuras, traiciones, amores platónicos y profundas verdades.

En la actualidad compagina su trabajo como creativo y formador en una de las empresas de tecnología más importantes del mundo con su afición a la escritura y a la fotografía. Su decidida apuesta por el mercado digital es toda una declaración de intenciones, en consonancia con los valores que defiende Alicia a lo largo de las casi 300 páginas que forman Astralis.

Y como mañana ya os hablaré del libro en particular, hoy os dejo el prologo escrito por Javi Araguz (La estrella y El mundo de Komori) que podréis encontrar entre las páginas de Astralis.

Conocí a Antonio Bazalo hace ya algunos años cuando me envió un ejemplar de cortesía de Astralis e hicimos buenas migas. Acababa de mudarse a Barcelona y pensó que sería buena idea regalar algunas copias de su obra a gente que se la pudiera criticar. Tal vez un autor recién publicado como yo no era la persona indicada para dar consejos a nadie, pero su libro me llamó suficientemente la atención como para aventurarme a orientarle. Lo primero que le dije fue: “No es comercial”. Y eso podía tomarse como un cumplido… o todo lo contrario. Por suerte para mí, a Antonio no le daba miedo nadar a contracorriente.

Astralis puede ser muchas cosas, pero si tuviera que definirla con una única palabra, probablemente elegiría diferente. Antonio no le rinde cuentas a nadie, ha escrito el libro que a él le gustaría leer. No se amolda a modas literarias ni utiliza esos truquillos de los que a veces abusamos los escritores; su obra surge de la necesidad pura de contar una historia, SU historia.

Con el tiempo descubrí las pasiones de Antonio (la tecnología, el cine, la astronomía, lo místico…) y el origen de su novela. Lo que al principio iba a ser un guión de cortometraje luego se convirtió en uno de película y más tarde en una saga literaria.

La primera vez que la leí me deslumbraron sus pequeños detalles (que trataré de obviar aquí para no restarle sorpresa), luego entendí que lo que él quería contar trascendía más allá de la historia de Alicia, su protagonista. Astralis empieza relatándote la aventura de una misteriosa muchacha y termina sumergiéndote en medio de una crisis cósmica. Sí, ¡he dicho cósmica! Pasa de lo pequeño a lo inmenso con un arco de transformación que evoluciona sin freno a lo largo de sus tres libros. La obra riza el rizo con cada secuela, reinventándose a sí misma constantemente.

Como el buen vino, Astralis se ha beneficiado del paso del tiempo y ha madurado hasta convertirse en lo que es ahora. No se trata de una lectura sencilla y ahí radica el desafío. Antonio te introduce en su mundo sin explicaciones previas para que descubras lentamente cuáles son sus reglas y qué misterios tendrás que desentrañar. Astralis es un juego en el que no puedes permanecer al margen como un mero espectador; es un libro que reclama toda tu atención, que no es complaciente con el lector.

Es diferente.

Dan ganas de leerlo, ¿verdad? Pues os dejo con los primeros capítulos, la web del libro y el twitter del autor para que vayáis abriendo boca.

¿Os llama la atención? ¿No os dice nada? ¡Nos leemos mañana!