Estilo de vida mediterráneo
Come de todo, pero moderadamente.
Consume productos locales y de temporada. Los alimentos de temporada, frescos y poco procesados, contienen más nutrientes. Siempre que sea posible, se debe dar prioridad a los productos tradicionales, locales, respetuosos con el medio ambiente y la biodiversidad.
Cocina y comparte. Dedica tiempo a la cocina y disfruta de la comida tranquilamente sentado a la mesa en compañía. Actitud slow!
Bebe 2 litros de agua al día, tu decides cómo, las infusiones son una buena forma.
Muévete. Un mínimo de 30 minutos a lo largo de día: camina, sube escaleras, corre, patina...mucho mejor si puedes hacerlo al aire libre!
Descansa. Duerme las horas necesarias y dedica tiempo para ti.
El aceite de oliva es el rey de la dieta mediterránea, un alimento rico en vitamina E, beta-carotenos y ácidos grasos monoinsaturados que le confieren propiedades cardioprotectoras, muy bueno para el corazón.
El estilo de vida mediterráneo es la base de la dieta, para completarlo come:
A diario: Frutas, verduras y legumbres, combina colores, texturas, cómelos crudos o cocinados. Cereales, pasta, arroz y especialmente sus productos integrales.Frutos secos, semillas.Especia tus comidas: orégano, albahaca, pimienta...*Una buena forma de dar sabor y reducir la cantidad de sal.Productos lácteos, mejor desnatados: leche, yogures, queso... *Ayudan a mejorar el equilibrio de la microflora intestinal.
Cada semana:Carnes blancas, pescado, marisco y huevos.Con moderación:Carne roja y procesadas
La dieta mediterránea fue declarada en 2010 Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Y ahora en 2014 se celebra el Año Internacional de la Dieta Mediterránea.
Más información: Fundación dieta Mediterránea
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