Dieta para combatir el frío

Estamos en pleno invierno y, excepto que vivas en las Islas Canarias, casi con toda probabilidad ya habrás sufrido en tus propias carnes los efectos del frío en este año que empezamos.

El invierno, además de la Navidad y bonitas postales nevadas, trae consigo también otros males típicos como son los resfriados y la gripe, las enfermedades reumatológicas, los sabañones o la depresión.

Una dieta falta de energía contribuye a reducir las defensas del organismo encargadas de protegernos del frío exterior. Si últimamente estás notando alguno de los efectos adversos del invierno en tu cuerpo, incluye en tu dieta los siguientes alimentos:

Pescado azul y frutos secos

Pese a que son los carbohidratos los nutrientes que nos dan la energía que hace funcionar a nuestro cuerpo, no todos ellos valen para ese propósito. Es por eso que debes buscar las grasas saludables de algunos alimentos – pescado azul, aceite de oliva y frutos secos, principalmente – para que engruesen la piel y refuercen la protección contra el frío.

Cebolla

Además de fortalecer las defensas, este vegetal disminuye el colesterol, por lo que el consumo a diario de una cebolla estimula la circulación de las extremidades, calentando así pies y manos.

Pomelo y kiwi

Para hacer entrar en calor a nuestro cuerpo, nada mejor que una generosa ración de cítrico, como las dos frutas que te hemos puesto y que, consumidas a diario, bastarán para activar la sangre.

Trigo sarraceno

Este típico cereal de invierno te aportará energía y cualidades nutritivas indispensables para entrar en calor, así que huye del frío preparando sabrosos mueslis o purés a base de trigo sarraceno.

Morcilla

Al ser un alimento rico en hierro, la morcilla mantiene los niveles de este mineral en nuestro organismo, imprescindible para controlar que la temperatura corporal no baje demasiado. Eso sí, debemos tener cuidado en casos de sobrepeso y colesterol.