Diluyendo el alcohol en palabras

“En lo profundo de lo mas alto”

Dicen que cuando las cosas se van acumulando dentro de ti, llega un momento en que te desbordan y acabas explotando, reflejando esos sentimientos agrios, amargos, en miles de cristales rotos y sucios. En cualquier caso, con el tiempo aprendes que las niñas de bien están siempre mejor calladitas y si no están calladas, al menos que dejen fluir sus problemas con cierto toque irónico sarcástico para que no se note el tono amargo, triste y denso que esconde cada una de sus palabras. Y sobre todo para conseguir mas de una carcajada o risa… Porque ya se sabe que en el momento en que realmente expongas como te sientes, mirarán hacia otro lado y te oirán, pero jamás te escucharán. Cuando termines, solamente asentirán, te dirán que todo pasará. Sin pena ni gloria, las alegrías le interesan a todo el mundo, las malas noticias solo te las comes tu…

Algunas personas comen, otras se emborrachan, otras disfrutan del sexo guiándose por el propio deseo, otras bailan de forma compulsiva en la pista de baile y otras distintas se esconden en lo que mejor saben hacer. Cierto es que estoy viviendo uno de mis mejores momentos profesionalmente, por primera vez parece que mis obras capten mas miradas, me han ofrecido una gran oportunidad y no debo desaprovecharla. Cierto es también que a pesar de ello tengo un trabajo que me ayuda a sobrevivir y debo de dar gracias por ello, aunque a veces tenga momentos de bajón en que vea todo negro y me pregunte ¿de qué me sirve lo que estoy viviendo? Pero no soy desagradecida, me siento muy afortunada por ello, por lo que estoy viviendo y por lo que estoy consiguiendo. Pero claro, no penséis que todo esto lo he conseguido de la noche a la mañana, desde hace 3 años evoluciono, trabajo y voy moviéndome que nada ni nadie me lo han dado gratis.

El caso es que yo no hago nada de lo anterior nombrado, yo mas bien me enfoco en lo que mejor sé hacer, así mantengo la cabeza ocupada, no pienso en lo que no debo y todos tan felices. Aunque debo reconocer que últimamente me da por los caramelos o las compras medio… ¿Compulsivas?

Hoy me he decantado por diluir todo lo que me preocupa en palabras, como el propio alcohol, solo que en tinta de plasma.

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