Son irracionales y provocan emociones negativas: son las distorsiones cognitivas, trampas mentales que nos hacemos a nosotros mismos.

Por distorsiones cognitivas conocemos a aquellos procesos erróneos que a veces pueden operar al interpretar la información. En palabras llanas, no son otra cosa que malinterpretaciones de lo que ocurre a nuestro alrededor, algo que a su vez nos genera emociones negativas.Aunque, en mayor o menor medida, todos podemos presentar en algún momento algún tipo de distorsión cognitiva, las personas con depresión acostumbran a sufrir con más frecuencia estos sesgos. Aprender a detectarlas y a analizarlas puede ser de suma ayuda para evitar los sentimientos negativos que estas generan. En este artículo te hablamos de las distorsiones cognitivas más frecuentes, ¿te reconoces experimentando alguna de ellas?1. Pensamiento dicotómico o polarizado (o todo o nada). De acuerdo a esta distorsión, la persona tiende a interpretar los acontecimientos y personas en términos absolutos, sin tener en cuenta los grados intermedios. Es lo que comúnmente se conoce como ver las cosas blancas o negras. Un ejemplo sería: “Como a mi compañera no le gusta mi trabajo, no le gustará a nadie”.2. Sobregeneralización. Es la tendencia a creer que algo que ha ocurrido una vez, ocurrirá muchas veces. Consiste en tomar un caso aislado y utilizarlo para extraer conclusiones generales válidas para todo. Por ejemplo: “Mi novia de hace cinco años me ha dejado. Nadie me va a querer nunca ya”.3. Filtro mental. La persona que experimenta esta distorsión solo se enfoca en los aspectos negativos y perturbadores de una experiencia, pasando por alto aquellos positivos. De esta forma, lo bueno se olvida y lo malo se instala. Un ejemplo podría ser: “Mi vida es horrible porque no tengo pareja” (olvidando que se tienen, por poner un ejemplo, un montón de amigos, salud y un buen trabajo).4. Lectura de pensamiento. La persona cree adivinar las intenciones, actitudes y pensamientos de los demás, los cuales, a su vez, acostumbran a ser negativos y generan emociones dañinas. Un ejemplo es: “En el fondo se está riendo de lo que le estoy contando, piensa que soy un payaso”. Esta misma distorsión puede aplicarse a los acontecimientos, cuando la persona tiende a “adivinar” el resultado de los eventos antes de que ocurran (“La fiesta va a ser un aburrimiento”).5. Magnificación y minimización. Consiste en, como su propio nombre indica, magnificar los errores propios y los éxitos de los demás, y minimizar los logros propios y los errores de los otros. Dentro de esta distorsión se engloban la visión catastrófica, por la cual la persona tiende a imaginar el peor escenario posible en torno a cualquier situación, y el negativismo, que es la tendencia a magnificar los aspectos negativos de una experiencia. Por ejemplo, “Poco importa todo lo que he ido consiguiendo a lo largo de estos años, este error que acabo de cometer es demasiado grande y lo tira todo por la borda”.6. Razonamiento emocional. Mediante esta distorsión, la persona formula argumentos basados en cómo se siente en lugar de hacerlo en la realidad objetiva: “Soy un inútil y no valgo para nada, jamás conseguiré un trabajo decente”.7. Debeísmo. La persona tiende a concentrarse en lo que considera que “debería” ser en lugar de ver las cosas como realmente son. De esta forma, se guía por reglas rígidas, estrictas que considera que deben aplicarse siempre sin importar el contexto. Un ejemplo puede ser: “Debería haber sido más atenta y de esta forma mi marido aún seguiría conmigo”.8. Etiquetado. Relacionada con la sobregeneralización y el razonamiento emocional, el etiquetado consiste en utilizar términos peyorativos para describirse a uno mismo en lugar de describir las cualidades de forma más objetiva (“Soy estúpido” en lugar de “He cometido un error como todo el mundo alguna vez en la vida”).9. Culpabilidad. Cuando opera esta distorsión, la persona tiende a echarse la culpa de cosas en las que no tiene ninguna responsabilidad o, por el contrario, a culpar a los demás de cuestiones que solo le atañen a ella misma.10. Falacias. Aquí distinguimos entre falacia de control (presuponer que se tiene que tener el control y la responsabilidad sobre todo lo que ocurre al alrededor), falacia de justicia (la persona tilda de injusto todo lo que no coincide con sus necesidades o creencias), falacia de cambio (creer que la felicidad propia depende de los actos de los demás), falacia de razón(creerse en posesión de la verdad absoluta) y falacia de recompensadivina (esperar que los problemas mejoren por sí solos).
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