Doce consejos para hacer que las fotografías de esas pequeñas obras de arte que son tus cupcakes también lo sean. Doce consejos que te ayudarán en la tarea. Nada mejor para comenzar una bonita aventura ¡Una pequeña colaboración con el blog de la maravillosa revista de repostería Sweet Magazine! ¡A por la cámara!
1.- Localiza el flash de tu cámara. Sí, ese pequeñito que salta cuando no hay demasiada luz. Localízalo, sé consciente de su existencia ¡Y olvídalo para siempre! Tus cupcakes, esos que has creado con tanto cariño y dedicación, no se merecen la fea luz del flash de la cámara ¡Utiliza luz natural, poca o mucha, pero natural por favor!
2.- Coloca tu cupcake o cupcakes cerca de una fuente de luz natural (¡Atención, cerca y no en medio de la habitación con la ventana más próxima a cinco metros de distancia!) y evita la luz solar directa. Si es necesario, coloca delante de la ventana algún tipo de difusor que matice y suavice la luz: una sábana blanca, un visillo finito blanco, una cortina de ducha blanca ¡O un difusor profesional!
3.- La luz lateral favorecerá mucho el volumen y la textura de la decoración del cupcake. Si quieres evitar sombras molestas y volcar más luz sobre tu creación, coloca alguna superficie que refleje la luz natural del otro lado: una cartulina blanca, una plancha de corcho blanco ¡O un reflector profesional!
4.- Hazte con un trípode para tu cámara y enamórate perdidamente de él. Si no tienes trípode, al menos busca una superficie de apoyo que evite cualquier tipo de movimiento en la cámara mientras disparas. La nitidez de la imagen es tan importante como la luz.
5.- Cuando hagas tu fotografía no te pegues al cupcake con la cámara. Aléjate de él y haz zoom para acercarte. Es decir, utiliza distancias focales largas, al menos que no estén por debajo de 50 mm. La profundidad de campo será menor, con lo que podrás conseguir ese fondo desenfocado tan bonito, cerrarás el ángulo de visión centrando la atención sobre tu composición y tu precioso cupcake se verá tremendamente favorecido.
6.- Observa tus cupcakes durante un minuto ¿Tienen altura y una bonita decoración lateral, o un precioso “topper”? Coloca tu cámara al mismo nivel y dispara ¿Es más bien bajito pero coronado con una bonita flor? Coloca tu cámara en un ángulo superior y ligeramente inclinada hacia él.
7.- Los cupcakes suelen ser pequeñas obras de arte que merecen ser los protagonistas absolutos de la fotografía. Utiliza fondos y superficies sencillas, sin distracciones, y complementos de colores neutros o perfectamente coordinados con los colores del cupcake. Te ayudarán a centrar la atención sobre el mismo ¡Nada de utilizar la librería del salón, el ficus al lado y la lámpara de flores como fondo! y ¡Cuidado! La cápsula debe estar perfectamente coordinada en color y tema con el cupcake.
8.- Uno, tres, cinco ¡Siete! Fotografía siempre un número impar de cupcakes. Es más atrayente, más atractivo, y el número tres funciona como una fórmula mágica.
9.- Evita las superficies muy brillantes: cápsulas plateadas o doradas, platos o cucharitas con excesivo brillo… A no ser que seas un experto en cuanto a la luz se refiere, los reflejos que pueden crear en la fotografía no quedarán nada bonitos y distraerán al espectador.
10.- Pon en marcha tus dotes de observación, averigua cual de tus cupcakes es el que no tiene ni un solo defecto y hazlo protagonista de la foto. Si tiene algún pequeño fallo, colócalo de tal manera que no se vea en la imagen ¿Alguna pequeña irregularidad que ha pasado desapercibida sin querer? Photoshop es un fiel y buen amigo…
11. Si la decoración sufre con el calor, consérvalos en la nevera hasta el momento mismo de disparar. Mientras tanto, y para preparar todo el set, la iluminación y los ajustes en tu cámara, utiliza un doble convincente o uno de los cupcakes que no vayas a inmortalizar.
12.- Y por último, algunos consejillos de estilismo para cupcakes:
Si quieres utilizar algún complemento comestible para tu fotografía, asegúrate que la receta lo contenga: azúcar o azúcar glas, cacao, frutas frescas, chocolate, frutos secos… Nada despista más que unos cupcakes de fresa, con unas nueces al lado…
Los toppers, ya sean naturales (una cereza, unas virutas de chocolate, una avellana caramelizada…) o artificiales (¿Habéis visto esas preciosas banderas o cartelitos pinchados en el cupcake?) crean altura, belleza e interés en la imagen.
Si la cápsula no es muy bonita y quieres crear un aspecto más informal en la foto ¡Ábrela por completo y colócala con cuidado para que se vea el interior!
Y si queréis crear un poquito de textura y ambiente distendido, nada mejor que dejar caer sobre la mesa o superficie un poquito de azúcar, o bolitas nacaradas, o chispas de chocolate, o virutillas de colores de la decoración.
Si al sacar los cupcakes del horno compruebas que las cápsulas están estropeadas y han perdido color, no tienes más que meter tus cupcakes (sin quitarlas las cápsulas) en unas nuevas para que en la fotografía luzcan perfectas.
Utiliza flores frescas para decorar tus imágenes de cupcakes ¡Son la última moda!
Si no todos, al menos ten en cuenta algunos de estos consejos, y verás como no solamente tus cupcakes son pequeñas obras de arte ¡Tus fotografías también lo serán!