¿Qué tal va la semana? Ya nos queda poco para terminarla y meternos de lleno en la semana de Halloween. Hoy me he decidido por una receta que no tiene nada que ver con Halloween pero hacia ya tiempo que la tenía y ya era hora de decidirse. Es una comida que a algunos no les gusta por las espinas y porque no es de muy buen gusto encontrarse con ellas en cada mordisco, tengo que reconocer que yo soy de esas personas, que si un pescado está lleno lleno de espinas al final termina por aburrirlo... pero este no es el caso. Las doradas son fáciles de quitar la piel y encontrar las espinas, que son pocas. Así que os traigo doradas al horno sobre una cama de patatas, cebolla y pimientos verdes. Es muy fácil, no mancha y están deliciosas.
¿Qué necesitamos? Doradas (tantas como personas vayan a comer)PatatasCebollasPimientos verdesAceite de olivaSal ¿Cómo lo preparamos? Precalentamos el horno a 200º C.Mientras les quitamos las tripas a las doradas y ,una vez hecho, pelamos, lavamos y cortamos las patatas, cebollas y pimientos verdes.Lo primero que vamos a poner en la base del recipiente donde las vamos a hornear son las patatas, cebollas y pimientos, les echamos aceite por encima y sal.Ahora encima de la cama que hemos hecho ponemos las doradas, las cuáles también les pondremos por encima un poco de aceite y sal.Las metemos en el horno y cuando lleven unos 20 minutos les damos la vuelta.En unos 40 minutos en total las tendremos preparadas y sólo faltará comerlas.