Lo que daría yo por dormir hasta que me duelan los sueños. Lo que daría por descansar a pierna suelta durante veinticuatro horas seguidas, y olvidarme de todo. Lo que daría por acostarme sin pensar que al día siguiente tengo que madrugar para estudiar.
Creo que es lo que mas necesito ahora: dormir, dormir bien, dormir mucho… pero es precisamente cuando menos tiempo tengo para ello. Pero bueno, ya queda menos…
¿Y no os parece preciosa la frase que titula esta entrada? Porque en cuanto la escuché por primera vez supe que tendría que publicarla algún día en mi rincón particular.
Se trata de un verso repetido en la canción Octubre, de un grupo casi desconocido llamado Ruidoblanco. Desde hace unas semanas, esta canción suena en mi reproductor a diario, como merecido descanso por mis arduas horas de estudio.
Ruidoblanco es un grupo catalán que descubrí hace muy poquito gracias a un amigo. No he escuchado más de tres o cuatro canciones de ellos, y a pesar de que aún no tienen disco en el mercado, están empezando a pisar fuerte en esto de la música. La letra de Octubre me enamoró desde el principio. El videoclip esta muy cuidado, y he empezado a recomendar esta bandaa todo el mundo, aún sin conocerla a fondo. A vosotros por supuesto también, porque me suenan francamente bien. Si os gusta el pop más tradicional, pero joven y original, dadles una oportunidad, escuchadlos.
Me despido anhelando ese día en el que pueda… “dormir hasta que me duelan los sueños... despertarme y haberlo olvidado todo...” que aún se antoja lejano.