Revista Cocina
Dos años. Solo dos. Y, aún así, de algún modo, siento que llevo aquí toda la vida. Es curioso cómo la etiqueta de "blogger" te acompaña todo el tiempo y no es ninguna tontería. Desde 2014 llevo todos las semanas diciendo cosas como "¡Eso quedaría genial en el blog!", "Hoy no puedo salir, tengo que actualizar el blog", "¿Te apetece ir a hacer una sesión de fotos?", o "Los cupcakes no son para nadie, son para el blog".
El 16 de mayo, Breakfast with Cupcakes tal y como lo conocéis ahora cumplió dos añitos. Para celebrarlo hice unos cupcakes Sundae de Cereza, como no podía ser de otra manera, y soplé esa vela. No he podido dejar de pensar desde entonces en cómo me cambió la vida el blog. Me ayudó a ser menos tímida, a ser más organizada, a conocer personas maravillosas, a intentar superarme a mí misma... ¡Hasta estoy aprendiendo SEO y HTML!
En el primer cumpleaños os conté algunas de las cosas que he aprendido como bloguera y que me parecen vitales. Honestamente pretendía utilizar esta entrada para dar tips de experiencia a bloggers principiantes, pero en el último momento he decidido que no. En lugar de eso quiero destapar el trabajo que tiene detrás y que he podido comprobar en primera persona en estos dos años.
Hace unos meses, Montse y yo hablábamos sobre el declive de los blogs y el auge de los youtubers y viners y me propuso hacer un snapchat/vine llamado "ShitBloggersDo" con vídeos cortos graciosos sobre las cosas avergonzantes que todos los blogueros hacemos. Como estar en piernas y tirantes en pleno diciembre para fotografiar un vestido de Nochevieja o arrastrarte por el barro para colarte debajo de un verja y poder hacer fotos en un lugar único que no está abierto al público. Lo cierto es que me pareció una idea genial, pero nunca llegamos a hacerlo.
El caso es que donde todos ven fotos bonitas, looks impecablemente pensados, sonrisas y frivolidad, lo que hay realmente son horas de trabajo para algo que, en la mayoría de casos, no te aporta ninguna ganancia real. Tras dos años detrás del ordenador para mantener viva esta página me he dado cuenta de que no es tan sencillo como todos imaginan. Y, por si aún os preguntáis por qué no llegamos a hacer ese proyecto, fue por falta de tiempo.
Estas son las cosas que no se ven:
1- Buscar una localización que tenga buena luz, sea bonita, no pase mucha gente porque salen en las fotos, no haya cosas feas como señales o papeleras, tenga un color de fondo que pegue con tu estilismo...
2- Ahorrar durante meses para tener un buen equipo de fotografía e iluminación. Y aprender a usarlo. Y transportarlo.
3- Largas horas de edición de más de 100 imágenes para luego publicar 9.
4- Emplear los ratos libres en buscar ideas y formas económicas de llevarlas a cabo.
5- Elaborar (varios intentos de) recetas y DIY. Cuéntese el tiempo que conlleva eso y el salir a buscar los productos necesarios.
6- Peleas con el HTML, el CSS, Blogger, Photoshop and company. Todo ello para tener buena interfaz.
7- Horas de lectura de manuales de SEO y de intentos (fallidos) de entender e interpretar las herramientas de Google.
8- Realizar collages manualmente. Es decir, ir tienda online por tienda online buscando los productos que más te gustan, guardar las imágenes y enlaces, importarlo a Photoshop, la herramienta lazo, "mierda, no me caben"...
9- Días enteros poniéndote al día de los millones de blogs que existen en el mundo. Y dedicar tiempo a comentar a las blog-amistades.
10- Actualizar Instagram. Pinterest. La página de Facebook. Google+. LinkedIn. Bloglovin. Snapchat. Vine. YouTube. GFC. Twitter. Y si todavía siguiera existiendo Tuenti, también.
11- Mantener los antiguos posts publicándose.
12- Mailing diario con empresas y compañeros.
13- Asistir a eventos.
14- En mi caso, estar atenta a todo lo interesante para utilizarlo en el top 5 de la semana.
15- Publicar mínimo una vez a la semana. Todos los días para quienes trabajan de esto full time. Lo que conlleva encontrar el momento indicado para hacerlo, esperar a que se carguen las imágenes y redactarlo.
16- Administrar las ganancias y los sponsors.
17- Gastarse dinero en cosas como photo booths, props, alquileres, pago de profesionales, el dominio de internet, cuentas premium, estilismos y otras cosas necesarias.
18- Tener hábito y constancia. Para mí, la más importante si quieres que tu página tenga éxito. No puedo contar la cantidad de personas que dejan sus blogs colgados durante semanas o incluso meses. Estudios, trabajo, familia, eventos... La cuestión es que muchas personas se dan cuenta de que no pueden compatibilizarlo porque, a veces, supone sacar fuerzas cuando llegas cansado a casa, o quedarse despierto toda la noche, o pasar horas delante de una pantalla.
Pero esto es una oda a este pequeño trabajo. Porque a mí me ha merecido la pena durante estos dos años, porque me ha aportado mucho y porque estoy orgullosa de lo que he creado. A veces duele pensar que entradas como estas se van a perder en la inmensidad de internet después de tanto tiempo y dinero invertidos, pero lo cierto es que los días que actualizo me acuesto con una sonrisa, que se ensancha cuando veo los frutos de mi esfuerzo convertidos en comentarios, likes, mensajes o simples cifras de una de esas herramientas de Google que todavía no he aprendido a comprender del todo.