Dulce, dulce tentación (Sermón dominguero)

Buen domingo, estimados lectores. El título de mi sermón hoy es, en realidad, una referencia a una famosa canción de las pistas de baile pecaminosas a principios de los años 90 del pasado siglo. Corría el año 1991, y yo ya empezaba a formar conciencia de la creciente peligrosidad social e inmoralidad ramplona que se empezaba a ver en la televisión o escuchar en la radio. Para los más jovencitos leyendo esto, estoy hablando de una canción famosa del «dance» cantada por la «artista» Stacy Earl, titulada «Love me all up». La letra la podéis ver aquí. Una de sus frases era «sweet, sweet temptation», y ¡qué frase más apta para describir los tiempos que corren! Vivimos en sociedades totalmente arrasadas por la tentación más diabólica, perversa, sucia, pecaminosa, e inmoral que yo recuerde en mi vida. Obviamente ha habido otras civilizaciones parecidas, pero yo no viví en época de Sodoma y Gomorra, aunque tengo la sensación que se repite. Esa canción, recuerdo, estuvo prohibida en mi colegio y algunos compañeros de clase se escondían con sus novias y en verano se iban a la playa para escucharla (y otras canciones inmorales). Recuerdo perfectamente como en el verano de 1991, pillé a un compañero de clase con su novia, morreándose ilícitamente y escuchando música dance y rock en la playa. Me suplicó no decirle nada al pastor, pero yo le dije que el pastor era lo de menos…porque ya Dios los había visto. No pareces que seas salvo, recuerdo decirle. No parece que te hayas arrepentido ante Cristo. ¿Su respuesta? «Pero qué fariseo más repugnante eres, Alfred». Le dije, bueno…Jesucristo también era fariseo, así que si me parezco a Cristo en eso, algo hago bien si un impío me ve como algo rechazable.

Acabo de regresar de un viajecito al centro de este pueblo (está a unos 20 minutos en coche de mi plantación). La chica que me ha venido a recoger es originaria de la ciudad de Richmond, Virginia. En el camino, me preguntó sobre Nueva York. «Pues yo viví allí»,me dice. «Además, estuve viviendo cuando pasó lo de las torres gemelas…pero qué casualidad que ese día, los judíos no fueron a trabajar». Que sí señores, que en esta tierra la gente es muchísimo más «políticamente incorrecta» que en el norte y así se habla. Le dije que yo no tenía tan claro si todos los judíos no fueron al trabajo ese día, pero de lo que sí estoy seguro es que no nos vendría mal aplicar sus 10 mandamientos de la ley de Moisés. «Bueno, en eso te entiendo…porque Biden…uff….y además la familia Bush, super corrupta», me afirmó. Siempre tengo charlas muy amenas con los conductores en esta tierra. «Lo que no entiendo es cómo un pueblo que tuvo los 10 mandamientos actualmente sean los responsables del 11 de septiembre», afirmó tajantemente la chica rubia de Richmond. Iba a decir algo, pero…da para pensar efectivamente. Mientras tanto, hablando de judíos, pase al libro de Éxodo, capítulo 20 en tu Biblia. Hoy hablaré sobre esa «atracción fatal» que algunos sienten por el pecado y la vida inmoral.

Considera por unos momentos la cascada de beneficios para tu país si se obedecieran los 10 Mandamientos. De la noche a la mañana, la nación sería completamente diferente. Estaríamos honrando al Dios de la Biblia y obedeciéndolo. Estaríamos en la iglesia todos los domingos (día de obligación, además). Respetaríamos la autoridad espiritual de la palabra de Dios. No asesinaríamos. No habría adulterio. Nadie mentiría. No habría robo. No habría trampa. No habría envidia. No habría codicia. El país se transformaría de la noche a la mañana. No tendríamos la crisis de delincuencia como la que tenemos porque a los asesinos, pedófilos, terroristas y otros criminales se les llevaría a la horca pública como se hizo durante siglos en Occidente. Los «antifa» y anarquistas terroristas no incendiarían nuestras grandes ciudades. No se haría apología del aborto salvo en casos donde la vida de la madre esté en peligro o haya una violación. No existiría el tráfico de drogas que viene desde México…y muchos latinoamericanos saben de lo que hablo…porque muchos tienen narcotraficantes en sus países. Pero más importante aún, no existiría una DEMANDA por la droga de parte de la juventud anticristiana. Ningún colegio estaría enseñando eso de la «teoría crítica de la raza», que es una doctrina racista contra los blancos. Nadie estaría cediendo ante las exigencias de políticos corruptos e ilegítimos, porque la nación se volvería pura ante el trono de Dios.

El domingo por la mañana, las iglesias estarían a tope de gente adorando al Señor. Piénsalo. ¿Alguna vez has considerado las riquezas de la justicia bíblica, divina, y de hacer el bien? Métete esta frase en la cabeza: «Las riquezas de la justicia». La Biblia dice: «La justicia engrandece a la nación, pero el pecado es afrenta de cualquier pueblo». Y eso incluye América, por supuesto. En este momento, estamos atravesando por una feroz guerra cultura por el alma de esta nación. Es una guerra entre los que aceptan los valores bíblicos, de toda la vida, la constitución de gobierno limitado y libertades, y los que quieren que EEUU se convierta en un país «progre urbanita globalizador», socialista, apátrida, sin Dios. Una de esas fuerzas ganará. El premio es para el que gane el corazón de tus hijos y la próxima generación de juventud.

La gente dice: «Pero Alfred, Alfred, los 10 Mandamientos son un documento antiguo, del Antiguo Testamento. Realmente no es aplicable a una sociedad sofisticada como la nuestra». Señores…señoras….¿sofisticados, nosotros? No, no somos «sofisticados». Ni siquiera somos espirituales. «La ley del SEÑOR ES PERFECTA». Di eso en voz alta conmigo. «La ley del Señor es perfecta». Y para aquellos de ustedes que quieren escuchar eso del Nuevo Testamento, Jesús lo dijo de esta manera en Mateo 5:17: «No penséis que he venido a abrogar la ley. NO VINE a abrogar la ley, sino a cumplir la ley». Escucha y lee. «Pero cualquiera que haga y enseñe estos mandameintos, será llamado GRANDE en el Reino de Dios», final de la cita. Jesús de Nazaret. ¿A cuántos de vosotros os gustaría ser llamados «grandes» en el Reino de Dios por Dios mismo? Entonces HAZ y ENSEÑA estos mandamientos a tus hijos. Ojalá lo que Dios ha establecido en las escrituras haga que esta nación tenga una reforma espiritual.

A ver, al texto. Éxodo 20:4-6: «No te harás imagen, ni ninguna semejanza de cosa que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra:  No te inclinarás á ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos, sobre los terceros y sobre los cuartos, á los que me aborrecen, Y que hago misericordia en millares á los que me aman, y guardan mis mandamientos.» Dios dice que los que no lo aman, los que tienen imágenes idólatras que adoran, recibirán su castigo por cuatro generaciones, que son 200 años. Dios es un Dios celoso, y quiere que simplemente ames a su hijo y obedezcas su palabra. Oremos: Padre, en la autoridad del nombre de Cristo, escuchemos hoy tus mandamientos, y permitamos que nos cambie para ser cristianos piadosos y justos en este Estados Unidos en un momento en que este país necesita una reforma espiritual desesperadamente. En el nombre de Jesús, Amén.

¿Qué es una dulce tentación? Es una atracción fatal que, al principio, parece atractiva e irresistible, pero al final te destruirá por completo. Un ejemplo que me viene a la mente es al típico chico borracho en un bar, que es seducido por una mujer y cuando piensa que ya la tiene en la cama, de repente sale el amante o el chulo de la puta y lo mata o le roba. Esto ha ocurrido en decenas de ocasiones en EEUU. Son gente que se acerca demasiado al pecado, y, como un rayo, son golpeados, asesinados y ahí queda. Muertos por una atracción fatal. ¿Cuántos de vosotros no habéis oido eso de «venga hombre, una caladita del porro, no te hace nada»? A tu alrededor, constantemente vas a tener personas que te arrastran hacia el pecado, al vicio, a la vida desordenada. Hay gente así en mi propia academia. Sabemos que hay jóvenes que durante el recreo se esconden en los matorrales cerca de las vías del tren. Son impíos, rebeldes por la causa del Diablo, y cuando les pillamos, son inmediatamente castigados o expulsados. El pasado cuatrimestre tuvimos a un grupito de «rebeldes» intentando influir de forma negativa a los demás. «Buah, las normas del Señor Coll son absurdas», espetaban. «Tenemos derecho a escuchar la música que nos de la gana». Fueron a un concierto de rock y un joven acabó borracho y hospitalizado. Qué barbaridad. Bendito sea Dios que en nuestra academia sí nos tomamos el pecado en serio, y ese grupito de indeseables fue expulsado y reenviados, como paquetes defectuosos, a sus padres. Es increíble el poder que tiene una manzana podrida para infectar al resto.

Mucha gente se deja tentar por culebras venenosas porque sienten una atracción e intriga por los ruidos que hacen y el aspecto. Cuando se acercan demasiado, es demasiado tarde. Los hijos de Israel fueron librados de la esclavitud de Egipto por diez milagros deslumbrantes de la poderosa diestra de Jehová Dios. Atravesaron el Mar Rojo hasta el monte Sinaí donde Moisés se encontró cara a cara con Dios para recibir estos Diez Mandamientos. Moisés había subido a la montaña para estar con Dios durante 40 días. E Israel cedió a una tentación fatal. Habían vivido durante 400 años en una nación llena de decenas de ídolos. Permitieron que su pasado controlara su futuro. ¿Y tú? No permitas que tu pasado controle tu presente o tu futuro. San Pablo dijo: «Olvidando las cosas pasadas, prosigo al premio de la suprema vocación, que es en Jesucristo». No te dejes intimidar por la escoria que siempre te dice «ayy pero tu en el pasado eras tal». NO. Ahora eres un hombre NUEVO en Cristo. «Ayy pero yo recuerdo cuando tu fumabas porros con nosotros, y ahora te las das de super cristiano»…ya, y les debes decir «claro, porque Cristo me ayudó a ver la luz. Sálvate si puedes antes de que sea demasiado tarde». ¿Tú no has conocido gente así? Gente que constantemente vive en tu pasado, intentan atraparte en el pasado porque odian que seas una persona reformada y limpia. «El mal de muchos, consuelo de tontos», reza la frase popular, y es cierto. Esa gente, como sigue viviendo en un estílo de vida pecaminoso, intenta que tú vuelvas a serlo.

En Sinaí, mientras Moisés estaba en la montaña reuniéndose con Dios, Aarón elaboró ​​un toro de oro para que los hijos de Israel lo adoraran mientras Moisés no estaba. El toro era el dios egipcio del poder sexual. El resultado es que cuando Moisés bajó del monte Sinaí, los hijos de Israel estaban teniendo una orgía sexual masiva en el desierto: solo una prueba viviente, cuando las autoridades divinas se ausentan, todo el infierno se desata. Punto: lo que adoras te controlará. Lo que adoras te controlará. Ese espíritu sexual carnal, vicioso, barrió el campamento judío. El poder demoníaco era una atracción satánica y fatal. Dios enterró vivos a miles de judíos en un terremoto para demostrar su furia. Dios no tolerará que violes su ley. Moisés les dijo «moriréis por la ley por vuestra desobediencia». Adorar un ídolo es adulterio espiritual, y provoca la ira de Dios rápidamente y para las generaciones venideras. Esto es un tema muy importante. Tener un ídolo en tu hogar le da a Satanás una licencia para tener presencia en tu casa. ¿Qué ídolos tienes en tu casa? Piénsalo y destruye los ídolos en tu casa. Tíralos a la basura, quémalos, o, si se trata de un mancebo viviendo con tu hija y sin estar casados, échalo de casa. Si tienes hijos rebeldes que no te respetan, échalos de casa hasta que se arrepientan. NO TOLERES JAMÁS LA FALTA DE RESPETO A DIOS EN TU CASA.

En la historia, el Faraón gobernó Egipto con el símbolo de una serpiente en su corona. La Biblia dice: «Esa serpiente antigua, el diablo». Un ídolo en tu casa, según Dios, es tremendamente peligroso. La pregunta es: ¿Qué ídolos tienes en tu hogar que invitan al príncipe de las tinieblas a gobernarte?

Recuerda: una dulce tentación es muy atractiva al principio, pero al final te destruye. ¿Tienes relaciones sexuales en tu vida fuera del matrimonio? DÉJALO. PARA. Rómpe esa relación o cásate, porque esa es la ley de Dios. Nunca prosperarás hasta que obedezcas las leyes de Dios. Ahora bien, he tenido jóvenes que me miran a los ojos y dicen: «Bueno, solo estamos tratando de conocernos». Ya, pero es lo que haces después de decir la frase «Sí, acepto» en la boda. ¿Es tu dulce tentación el dinero? Escúchame. NO ES PECADO ser rico. La Biblia dice acerca de Abraham, el padre de todos los que creen, es decir tu padre espiritual, que era MUY RICO EN GANADO, ORO, Y PLATA. Curiosamente, esos tres elementos siguen siendo elementos de mucho valor. Solo es pecado cuando amas lo que tienes más de lo que amas a Dios. No te dejes jamás engañar por los falsos en la Iglesia Católica que hablan de «desigualdad de ingresos», insinuando que ser rico es algo malo. Al contrario, la pobreza es vergonzosa y en muchos casos es resultado directo del PECADO. Te invito a que leas el libro de los Salmos, capítulo 37, versículos 25 al 29: «Mozo fuí, y he envejecido, Y no he visto justo desamparado, Ni su simiente que mendigue pan. En todo tiempo tiene misericordia, y presta; Y su simiente es para bendición. Apártate del mal, y haz el bien, Y vivirás para siempre. Porque Jehová ama la rectitud, Y no desampara sus santos: Mas la simiente de los impíos será extirpada. Los justos heredarán la tierra, Y vivirán para siempre sobre ella». Lo que diga un cura católico envidioso y corrupto, o el papa argentino en Roma, no vale un pimiento porque no son las palabras directas de Dios.

Esto es lo que indigna a los humanistas, a los tiranos marrones y paganos del Tercer Mundo, a cristianos «progresistas», y a la «inteligentsia» académica urbanita, musas del estado del bienestar que compran los votos de la gente con el dinero de tus impuestos. La única solución verdadera a la pobreza es la fidelidad a Dios y a la obediencia a su Palabra revelada: LA BIBLIA. No hay otra solución tampoco para la pobreza a largo plazo excepto la obediencia externa a los principios del Reino de Dios. Nunca te olvides que en la América protestante, NO HABÍA mendigos, ni mendicidad. Prácticamente no había sin techos, tampoco. Desde el siglo XX, cuando EEUU se hace cada vez menos protestante, el número de sin techos, mendigos, analfabetos funcionales, drogadictos, y otros seres antisociales no ha hecho más que crecer y crecer. En el siglo XIX, por ejemplo, hasta el más pobre en EEUU tenía su granjita, dignidad y ni se le pasaría por la cabeza pedirle dinero a nadie. ¿Qué pasa? Tranquilízate, lector. «¿Ayyy pero es que y si alguien no puede comer?» ¿No puede comer? Eso no te lo crees ni tú. ¿No hay un poco de harina de maiz? ¿No hay cereal? ¿No hay nada que puedas hacer para ganarte un dinerito y poner algo de comida para tu familia? Déja de mentir. Lo repito: NO HABÍA MENDIGOS en la América protesante. Y yo, personalmente, antes muerto que mendigo. La mendicidad debe ser castigada, no alentada como hacen los gobiernos actuales y la iglesia católica…la misma iglesia que además ampara a los extranjeros ilegales, incluso cuando si son pedófilos, terroristas o criminales comunes.

Recuerda, recuerda la historia de Josué en la Biblia cuando cayó ante Dios y preguntó, «¿Por qué? ¡No hay razón por la que no deberíamos haber ganado esta batalla!» Dios le contestó: «Levántate y deja de orar. HAY PECADO EN EL CAMPAMENTO. Josué fue a examinar cada tienda y finalmente encontró a un ladrón que escondía un tesoro robado. Entonces Josué le dijo que el juicio de Dios debe caer sobre él y su familia. Acán y su mujer fueron APEDREADOS hasta morir. Sus hijos también fueron apedreados. «Fueron reducidos a cenizas», dice la Biblia, para que Dios pudiera sacar el pecado de Israel.

Y ese es el mismo Dios que está sentado en el trono ahora mismo. Dios no tolerará que sus hijos le roben. Algunos roban su diezmo y ofrenda. Malaquías 3:8, «¿Robará el hombre a Dios? Me habéis robado en el diezmo y en la ofrenda. Maldito sois con maldición». ¿Crees que Dios traería juicio a Acán por robarle y no te lo traería a ti? Porque él, la Biblia dice, «No hace acepción de personas». ¿Es tu poder de atracción fatal? El poder corrompe. El poder absoluto corrompe absolutamente. Solo tienes que mirar a Washington, D.C. y saber que esa es la verdad o las grandes ciudades donde gobiernan los apóstatas. ¿Eres un padre alcóholico, que gobierna despiadadamente a su familia con puño de hierro y poder abusivo? ¿Tu mujer te tiene miedo? ¿Golpeas a tu mujer? Detente, no sea que te conviertas en un banquete para los gusanos. ¿Eres de los que se pasan todo el día en una esquina con cartelito mendigando? ¡Trabaja, parásito!

Ahora bien, cuidado. Al hombre no le está prohibido hacer una representación de nada. Tiene prohibido usarlo como instrumento de adoración. Entiende éso. Le está prohibido usarlo como instrumento de adoración. «No te inclinarás ante ellas, ni las servirás». Déjame ser un poco más claro. Es una violación del segundo mandamiento inclinarse ante una estatua de la virgen María o de san Pedro o de san Pablo, como hacen los católicos romanos. Dios no tolerará la idolatría de nadie por ningún motivo, ¡nunca! Deuteronomio 27:15, «Maldito el que rompiere un ídolo o fundiera una imagen y la pusiere en secreto». El hombre hace un ídolo para ayudarlo a adorar, luego se enfocan en la imagen, que se convierte en su Dios. Es idolatría tener una cruz alrededor de tu cuello a menos que Cristo esté en tu corazón. Entonces, ¿por qué los hombres hacen imágenes? Los hombres hacen imágenes porque han perdido la comunión con Dios. Necesitan una estatua para reducir a Dios, para poder envolver su pequeña mente alrededor de ella.

La Biblia dice: «Dios es espíritu, y los que le adoran, le adoran en espíritu y en verdad». Los hombres hacen ídolos en un intento de reducir el tamaño de Dios para asumir que Dios es susceptible a nuestro control. La idolatría es nuestro intento de contener a Dios y hacerlo manejable. Escucha esto: si tu Dios es tan pequeño, puedes contenerlo en un lienzo o controlarlo con una estatua, limitado al pensamiento de tu mente, no es digno de adoración. Si tu Dios es tan pequeño que puedes comprenderlo totalmente, ¡es pequeño, es débil, es impotente! Hay una imagen que debemos adorar. Jesús dijo: «Jesucristo, que es la imagen del Dios invisible». ¡Adórale! ¡Hónralo! ¡Sírvele! ¡Alabado sea él! ¡Dale alabanza! ¡Dale gloria! ¡Él solo es digno de alabanza! ¿Puedo oir un amén de mis lectores? El problema en la iglesia es que tenemos imágenes mentales de lo que Dios puede y no puede hacer.

Algunos de ustedes han renunciado a sueños porque están sirviendo a un Dios limitado. Estás viviendo una vida limitada. ¡Para! Deja de decir: «No me puede pasar a mí». ¡Empieza a decir: «El Señor reina, y nada es imposible»! Hay dentro de ti una chispa divina esperando estallar en toda su gloria, brillante y deslumbrante. ¡Ese eres tú! La sangre real del cielo corre por tus venas. Eres realeza. Sois hijos e hijas del Dios Altísimo. Por lo tanto, sabiendo que nada es imposible para ti, ¡experimenta la alegría, la emoción y la emoción divina de vivir la vida ilimitadamente para hacer lo que quieras! La Biblia dice: «Los que esperan en el Señor renovarán sus fuerzas. Montarán sobre alas de águilas». Volarán a los cielos más altos y mirarán el rostro de Dios. No renuncies a tus sueños. No renuncies a tus esperanzas. No renuncies a tu futuro. No renuncies a lo que heredas. No renuncies a tu familia. No renuncies a tu trabajo. ¡El Dios Todopoderoso es tu padre y eres un niño donde nada será imposible para ti! ¡Alaben al Señor en la casa! ¡Bendito sea su nombre!

Escucha. Si Dios pudo usar un palito de madera torcido en la mano de Moisés para sacar a millones de personas del cautiverio, si pudo sacar agua de una roca para un millón de personas, piénsalo, si pudo usar un asno para predicarle a Balaam, ooh, desearía poder borrar eso de la Biblia. Dios predicó un sermón a través de un asno que cambió el curso de la historia. Los predicadores deben recordar eso el domingo por la mañana. Si él puede usarme, puede usarte a ti. Si Dios te dice que vayas a pescar tiburones con una caña, ¡algo grande está por suceder! ¡Consigue una nueva visión de quién eres! Eres un hijo del Dios vivo. Él no es una estatua. Él no está limitado por el tiempo. Él no está limitado por lo que puedes pensar. No es la gran idea. Él es el gran Dios del cielo. Él es Todopoderoso. Él es tu padre. Él es vuestro padre que está en los cielos. Está mirando por encima de los balcones del cielo en este momento, gritando: «Te amo. Yo te hice. No patrocino fracasos. Quiero que vueles, vueles, vueles en las alas de la fe, más alto, más alto, más alto. Vive tu vida sin límite, nada es imposible contigo».

¿Qué es la fe? La fe es la osadía del alma de ver más allá de lo que el ojo puede ver. Haz de hoy el primer día del resto de tu vida. Crucifica tu miedo. Deshazte de tu duda. ¡Cree con todo tu corazón que nada es imposible para ti! Dios es nuestro Creador. Dios es más grande que las montañas. Es más grande que los gigantes. Él es más grande que tus miedos. Él es más grande que tus desventajas. Él es más grande que tus enemigos. Obedece a Dios y alcanza la grandeza. Atrévete a vivir la vida sin límites. No pares. No renuncies. No te dejes intimidar por los impíos y los hijos del diablo.

Tranquilos, que ya voy a ir terminando. ¿Puedes ponerte de pie? Quiero orar contigo hoy. ¿Hay ídolos en tu hogar, estatuas a las que le rezas, tableros de Ouija, cartas de tarot, literatura ocultista, pornografía, discos de música rock o imágenes de la Virgen María y los santos católicos? Eso es idólatra. Desaste de eso. Desaste de eso. ¿Quieres algo para leer? Abre Juan 3:16 y lee eso. ¿Hay tentaciones en tu vida? ¿Te dejas llevar por el «qué dirán» en vez del «¿Qué dice Dios en la Biblia»? PARA. Oremos: Nuestro misericordioso Padre Celestial, nos acercamos a tu santo trono en el nombre del Señor Jesucristo. Y te pido hoy que la sangre de Jesucristo que limpia de todo pecado nos limpie a todos y nos haga puros delante de ti: que renunciemos a nuestras tentaciones, que vivamos nuestra vida con confianza y realización, limitada a nada: porque nada será imposible para los que creen y son llamados conforme a los propósitos de Dios, en el nombre de Jesús. Y todos los hijos de Dios dijeron, amén.