Revista En Femenino
La violencia doméstica y la violencia terrorista tienen parecida naturaleza: son igualmente imprevisibles. Dormimos con el enemigo.
El enemigo no es Otro, no es algo que esté allá afuera, algo que podamos definir y vallar. Al enemigo lo creamos, lo cobijamos y lo alimentamos nosotros mismos.
La vida es algo efímero y frágil, y por eso mismo un milagro maravilloso, cuyo equilibrio cualquier brizna puede romper. Somos un instante en el tiempo y una mota de polvo en el universo.
La luz nos muestra que la realidad no es dual. Es una.