



El 25 de abril pasado, FISA (el Tribunal de Vigilancia de Inteligencia Extranjera) otorgó la orden al FBI, otorgándole autoridad ilimitada para obtener los datos por un período de tres meses, que finaliza el 19 de julio. Bajo los términos de la orden, se entregan los dos números telefónicos (emisor y receptor), al igual que los datos como la localización y duración de las llamadas. El contenido de la llamada en sí no está cubierto por la orden. Por lo tanto, según la información inicial, el programa crearía una base de metadatos, es decir, datos sobre los datos. “Nadie está escuchando sus conversaciones telefónicas. El programa no se trata de eso”, advirtió el presidente Obama, quien debió salir a explicar el complejo plan, denominado PRISM, tras las filtraciones en la prensa.

Al parecer, la canciller alemana, Ángela Merkel, habló con el presidente de EU para aclarar la situación. El tema se presentó en el curso de la cita entre la canciller federal y Barack Obama el pasado 18 de junio, en Berlín. El gobierno alemán exigió explicaciones sobre el plan de espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) conocido por “PRISM” al presidente de Estados Unidos, Barack Obama. Steffen Seibert, portavoz del gobierno alemán, dio a conocer que el tema se presentaría sin duda en el curso de la cita entre la canciller federal Ángela Merkel y Barack Obama.
Voceros del Ministerio de Justicia aseguraron a medios locales que se analizó la situación para verificar si Estados Unidos violó los derechos de privacidad de ciudadanos alemanes en su acción de espionaje. El programa “Boundless Informant” (Informante sin fronteras) es una aplicación que clasifica a los países con base en la cantidad de información espiada. El resultado es un mapamundi con graduaciones por colores que van del verde–que significa una cantidad baja de información– hasta el rojo –que indica los países más espiados–. Según la filtración, Alemania resultó ser, en marzo, el país más espiado de Europa, lo mismo que lo fueron China, Iraq, Arabia Saudita y el propio Estados Unidos. La noticia causó enorme revuelo en Alemania, donde la oposición exigió al gobierno que aclarara de una vez la situación. “El control ilimitado de todos los ciudadanos es inaceptable – dijo Volker Beck, miembro del parlamento alemán por el Partido Verde Europeo–. Actitudes contrarias a los derechos fundamentales de los ciudadanos, como el almacenamiento de datos o el espionaje en computadoras privadas no caben en un estado de derecho como el alemán”. El Partido Verde pidió de manera formal que el gobierno se refiriese al tema en el Parlamento durante esta última semana.


“No tengo intención de esconderme, pues sé que no he hecho nada malo”, comentó Snowden, responsable de destapar el escándalo del programa PRISM, que involucra a la Agencia Nacionalde Seguridad de Estados Unidos en una extensa operación de vigilancia a las comunicaciones, realizadas a través de siete de los más grandes servicios de Internet. Hasta que se destapó el escándalo,Edward Snowden trabajaba en Booz Allen Hamilton, otra empresa de defensa privada que tiene contratos con el gobierno de Estados Unidos. Su único motivo, dice enThe Guardian –donde reveló su identidad–, es “informar al público de lo que ha sido hecho en su nombre y de lo que se hace en contra de él”.Afirma que decidió filtrar la información, y renunciar a su cómoda vida –un sueldo de 200.000 dólares, un buen trabajo y una casa en Hawaii–, porque “no podía permitir de buena fe que el gobierno estadounidense destruyera la privacidad, la libertad de Internet y las libertades básicas para la gente en todo el mundo”. Pero la empresa en la que trabajaba lo despidió, alegando “violaciones a la ética de la firma y a las políticas de la compañía”. Y los Estados le lanzó su primera amenaza: “La revelación sin autorización de información sobre este importante programa, que es totalmente legal, es castigable”, dijo James Clapper, director de Inteligencia de Estados Unidos. El único precedente conocido es el de Bradley Manning, el exsoldado que filtró a Wikileaks los papeles del Departamento de Estado y que seenfrenta a una sentencia de cadena perpetua, y, antes de su juicio, fue sido sometido a tratos “crueles, inhumanos y degradantes“.

Edward Snowden parece una persona muy voluble y, según The Washington Post, en mayo de 2004, se alistó en las Fuerzas Especiales porque quería ir a Irak “a combatir la opresión”. Cuatro meses después, su experiencia militar se acababa, al partirse las dos piernas en un entrenamiento. Parece que, en 2008, votó por Obama. En las Primarias republicanas de 2012, dio dinero al candidato ultraliberal (mal llamado 'libertario'), Ron Paul. En noviembre pasado, no votó ni por Obama ni por Romney, sino por un tercer candidato, presumiblemente el ex gobernador de Nuevo México, Gary Johnson. Después de su frustrada experiencia militar, Snowden fue fichado por la NSAcomo guardia jurado, en un edificio del campus de la Universidad de Maryland, en College Park, las afueras de Washington, que aparentemente es una 'tapadera' de esa agencia, según el diario 'Detroit Free Press'. Aquel era territorio familiar para él. Aunque Snowden nació y se crió en Carolina del Norte, su familia se trasladó a las afueras de Washington, cuando él era adolescente.Vivió en Maryland, en Ellicott City, muy cerca de donde está la sede de la NSA, oculta entre los bosques y sin ninguna señalización en las autopistas que la rodean. Entre 2005 y 2006, Snowden entró en la CIA. En2007, trabaja en la Embajadade EEUU, en Ginebra, como experto en informática. Y ahí empezó a decepcionarse. Pronto empezó a pensar en divulgar secretos. Pero se abstuvo “porque la CIA tiene muchos datos personales, y podría arruinar la vida de las personas a las que había espiado”. Dejó la CIA, en 2009, y entró en Booz Allen Hamilton. Con esa empresa comenzó a trabajar con la NSA, posiblemente en Okinawa. Y, para él, firme creyente del 'Sí se puede' obamiano de las elecciones de 2008, fue un shock comprobar que el presidente de EEUU “estaba promoviendo y reforzando las mismas políticas que había dicho que iba a poner bajo control”.


El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, revelaba el jueves pasado que estaba ayudando a Edward Snowden a solicitar asilo político en Islandia. “Estamos en contacto con el equipo legal del señor Snowden e implicados en el proceso de negociación de su asilo en Islandia”, dijo en una rueda de prensa desde la Embajada de Ecuador en Londres, donde lleva ya un año encerrado . Assange se negó a aclarar si Snowden contactó con WikiLeaks antes de revelar a los diarios The Washington Post y The Guardian que la NSA y el FBI poseen un programa llamado PRISM con el que acceden a los servidores de hasta nueve empresas de Internet, con su consentimiento, para recabar información útil para Inteligencia. Reiteró que siente una “simpatía personal” por el exagente de la NSA y de la CIA, al que tildó de “héroe” por atreverse a dejar al descubierto otro de los programas de espionaje de la Casa Blanca. El caso de Snowden es similar al de Assange, que está refugiado en la Embajadade Ecuador en Londres desde el 19 de junio de 2012 a la espera de que Reino Unido le dé un salvoconducto para huir al país andino como asilado político. “Las revelaciones del señor Snowden–dijo– deberían llevarnos a preguntar si Estados Unidos es el tipo de país desde donde los periodistas tienen que solicitar asilo político por razón de su trabajo”, al tiempo que instaba a la Casa Blanca a “hacer lo correcto” y “cancelar inmediatamente la investigación contra WikiLeaks”.

El pasado viernes fue el día más largo del año, con el comienzo del solsticio de verano. En torno a esta fecha, se encuentran el día en que el Sol salió más pronto y aquél en que se puso más tarde. Hecho circunstancial no relacionado con las estaciones. Se da, también en esta época, el día del afelio, es decir, el día en que el Sol y la Tierra están más alejados entre sí a lo largo del año. Coincidió con el Día Internacional de la Música, que tiene como objetivo impulsar la música de dos maneras: saliendo los músicos aficionados voluntariamente a tocar a la calle; y, con la organización de conciertos gratuitos, en los que al público tuvo la oportunidad de escuchar a sus artistas preferidos. La Fiestade la Músicafue creada en 1987 por Jack Lang, entoncesministro de cultura de Francia, y su primera edición fue el 21 de juniode 1982. Esta celebración se ha internacionalizado. En su edición de 2006, se festejó en 250 ciudades de 120 países.

La primavera terminó políticamente con las palabras de Cristóbal Montoro sobre el error en la venta de propiedades atribuida a la infanta Cristina. Algo que, para él, “no tiene explicación”. Después de la espantada del martes en el Senado, donde no quiso responder a las preguntas sobre la cuestión, el ministro de Hacienda aseguraba en el Congreso que había pedido una investigación sobre lo sucedido. “No vean fantasmas volando. Son errores puramente administrativos. No perjudica la calidad del proceso judicial”, dijo a los periodistas cuando se le preguntaba sobre las implicaciones en el juicio del caso Nóos. El ministro pidió perdón a la Casa Real por el error, aunque admitió que no estaba en condiciones de dar ninguna explicación. Las dudas sobre el informe de Hacienda enturbiaron la investigación en torno a la infanta. La Fiscalía Anticorrupción investigó el informe de la Agencia Tributaria (AEAT) que atribuía a la infanta Cristina la venta entre 2005 y 2006 de varias propiedades inmobiliarias y terrenos por valor de 1,4 millones de euros. Un portavoz de Cristina de Borbón desmintió los datos del informe y el mismo lunes fuentes del Gobierno filtraban a El País que desde Hacienda había hecho saber "de manera infomral" al juez Castro que se trata de un error en los datos remitdos al juzgado. El ministro de Hacienda, se mostró muy prudente y apuntó que habría que ofrecer explicaciones “en la medida en que se hubiera producido algún tipo de error”.



El portavoz del sindicato de Técnicos de Hacienda (Gestha), José María Mollinedo, aseguró que siempre se pueden cometer errores, pero 13 y con notarios y registradores distintos es una cosa “muy extraña” y “algo inaudito”. Mollinedo se pronunciaba así en referencia al informe remitido por la Agencia Tributariaal juez Castro en el que atribuía a la infanta Cristina la venta de 13 inmuebles por 1,4 millones de euros, y que la propia Agencia justificaba debido a un error en el registro de documentos nacionales de identidad que coincidían con el de la Infanta. “Que un notario o un registrador se equivoque hasta se puede justificar, pero que trece (13) cometan la misma equivocación con la misma persona y con el mismo dni no se lo cree ni el más tonto del lugar –escribe, por su parte Carlosfer007–. Qué casualidad que se han equivocado todos con propiedades de la infanta Cristina y con un dni de lo más inusual, el 00.000.014-Z. De nuevo nos quieren tomar por gilipollas. Lo que dice un notario va a misa y, si dice que te has muerto y lo firma, date por jodido.De igual manera, si un registrador afirma que no tienes propiedades y es mentira, te ves negro para arreglar el follón que te ha organizado. Pero, en este caso, es distinto. Se han equivocado y se ha arreglado todo en 24 horas, para que luego digan que trabajan poco y mal. Lo que pasa es que los Urdangarines están hasta el cuello por culpa de los mangoneos (de mangar) de los últimos años y ya solo faltaba que la infanta figurara en la venta de dudosas propiedades de las que habría que buscar el origen. Así que carpetazo, no vaya a ser que haya vendido algo que no era suyo, o peor aun, que haya vendido algo que sea de todos”.


“Supongamos que ha sido un error humano –escribe Ignacio Escolar en su Diario.es, bajo el título ‘Las probabilidades matemáticas de que lo de la infanta sea un error’, junto con José Manuel Rey, doctor en matemáticas y profesor de la Universidad Complutensede Madrid–. Supongamos que en realidad han sido cuatro errores humanos consecutivos e independientes, uno detrás de otro y por parte de personas sin relación entre sí: cuatro registradores de la propiedad distintos que tramitaron esas 13 falsas ventas del enredo de la infanta y que enviaron el DNI de Cristina de Borbón a la base de datos de Hacienda por error. De entre unos 46 millones de DNIs españoles, los cuatro se confundieron y escribieron precisamente el de la mujer de Iñaki Urdangarín. ¿Qué posibilidades habría en el universo de que ocurriese una casualidad así? La probabilidad de que se equivoquen los cuatro registradores y escriban por error, al azar, el DNI de la infanta es del orden de uno entre un 10 seguido de 30 ceros. Es decir: una entre 10.000.000.000.000.000.000.000.000.000.000. O lo que es lo mismo, una entre diez quintillones. Una posibilidad entre diez billones de trillones.


David Torres alude el chiste de los 13 notarios: “El choque de trenes entre Hacienda y la infanta Cristina ilustra a la perfección la paradoja de qué sucedería si una fuerza irresistible se enfrentara a una piedra inamovible. Nada. No sucedería nada. La fuerza irresistible no es tonta y acabaría dando un rodeo mientras pide disculpas con una tosecita: ‘Perdone, no la había visto. Usted a lo suyo. Pues no tengo yo campo para pasar’. Al parecer, Hacienda se equivocó con el número de DNI de la infanta Cristina, a pesar de que sólo cuenta con dos dígitos. Es un error de esos tontos que a la postre ha resultado muy inteligente. Tan inteligente que muy probablemente pase a los anales de las matemáticas. El problema se enuncia más o menos así: 13 fincas valoradas en 1’4 millones de euros entre 13 notarios y me llevo 14. O también como un chiste infalible: el notario es el único animal que tropieza 13 veces en el mismo documento. Creíamos que las oposiciones a notaría incluían ecuaciones de quinto grado y logaritmos fuera de órbita, y al final tienen que llamar al conde Draco. Algunos ya están estudiando un cursillo de aritmética para repasar el cambio en kioscos y panaderías. No es el único 13 que hay en medio de este embrollo, lo que viene a demostrar que, en efecto, el 13 es un número que trae mala suerte. Sobre todo a Hacienda. Había 13 notarios, había 13 fincas valoradas en 1,4 millones de euros, el número de DNI de la infanta Cristina es el 14, el número de DNI de la infanta Elena es el 12. Con tal baile de cifras, la verdad, es casi imposible no liarse. Al final Hacienda no sabía si había 14 fincas, 12 infantas, 13 meses en el año y 1,4 notarios. Como ente casi metafísico, Hacienda está acostumbrada a fórmulas a gran escala, a números astronómicos, kilométricos, pero en estas cifras simples de andar por casa es donde mete la pata. Le pasa como al gigantón de La princesa prometida que fue vencido por un único espadachín subido a su chepa porque, como él mismo decía: ‘Estoy especializado en grandes grupos’. Igual que una princesa puede detectar la molestia de un único guisante a través de 14 colchones, la infanta Cristina ha localizado un error a través de 13 notarios.





Incidimos humorísticamente, en los temas de esta semana. Activistas con máscaras de los líderes de los miembros del G-8, protestan cerca de la sede de la cumbre. Otros…




















El segundo es la flashmob realizada en Sabadell con la participación de más de 100 personas de la Orquestra Simfònica del Vallès y los coros Lieder y Amics de l'Òpera y la Coral Belles Arts.
Y el tercero, se registró el mismo día en que empezaba oficialmente el verano, en el Teatro Real, en donde se escuchaba un sonoro y desafinado abucheo al ministro de Educación, José Ignacio Wert, desde las localidades altas. Fue al asistir junto a la Reina y la homenajeada a la gala en honor a Teresa Berganza en el Teatro Real. El ministro comienza a acostumbrarse a los pitidos y muestras de desconfianza y de rechazo. Pero mientras Rajoy le siga apoyando, aguantará impasible.