EEUU podría instaurar wifi en todo el país de forma pública y gratuita, con el apoyo de gigantes como Google o Microsoft y ante la negativa de empresas telefónicas y proveedores de internet que, como es lógico, ven amenazado su oligopolio de acceso a la red. La iniciativa fue propuesta en septiembre del año 2012 por la Comisión Federal de Comunicaciones y, de ser aprobada, todavía tardaría unos años en hacerse patente en las calles de Estados Unidos.
Eso significaría que las cadenas de televisión deberían vender o ceder ciertas frecuencias para que el gobierno pueda liberarlas al público y hacer realidad esta propuesta, sobre la que no se han pronunciado todavía. Me atrevo a decir que a las compañías responsables no les va a hacer mucha gracia esta reciente “obligación” y que pondrán todas las trabas legales a su alcance para retrasar su ejecución.
En mi opinión el acceso wifi gratuito y libre es una idea revolucionaria que tiene mucho éxito entre la población, como se está comprobando con su instauración en centros públicos y edificios del gobierno, así como en ciertos parques y áreas habilitadas. Lo que se consigue con esto es que cualquier ciudadano tenga acceso a la red, comunicaciones y al conocimiento que contiene sin importar su solvencia, cubriendo una necesidad que se está volviendo básica en los últimos años.