Aquí hay ambiente de fiesta pero la vida continúa y las estrategias de unos y de otros se siguen descubriendo, así como las inmediatas reacciones. Estados Unidos no habla y Egipto no puede decir pero extraña - o no tanto- un movimiento de 4000 efectivos del ejército a lo largo del Canal de Suez; la razón es la protección del mismo bajo amenza de ciertos países.
USS Harry S. Truman pasando bajo el
puente al Salam cercano a Ismailia.
Dando un paso más EE.UU., además de no hacer efectiva de los aviones de combate acordados, tampoco ha hecho entrega de los helocópteros Apache, de los carros de combate M1 Abrams y de los misiles antibuque Harpoon que estaban en el contrato. Sin ser esto suficiente también han congelado la entrega de 260 millones de dólares en cash. Desde Washington dicen que esta medida no es definitiva pero que los acuerdos entre ambos países estarán contínuamente bajo revisión. EE.UU. prohibe, oficialmente, cualquier ayuda a un país cuyo gobierno electo es derrocado en un golpe militar; hoy aún con lo evidente que fue la manifestación del 30-J y la posterior reacción que tuvieron los seguidores islamistas animados, armados y financiados por los Hermanos Musulmanes el hawaiano duda en si fue un Golpe de Estado o no lo fue y aún hoy, cuatro meses después, está buscando la retórica para explicarlo sin tener que romper la firma de los acuerdos egipcio-israelíes de Camp David.
Para embarrar un poco más el asunto Amnistía Internacional envía una carta a Obama pidiendo la congelación de toda ayuda, económica y armamentística, a Egipto porque " las fuerzas de seguridad de Egipto probablemente las usarán para violar los derechos humanos" (AI se basa en las declaraciones de beduínos del Sinaí que afirman haber visto cómo el ejército egipcio ha usado helicópteros Apache para destruir túneles en la franja de Gaza y que también fueron usados en la represión efectuada tanto en la frontera israelí como en el interior de la península; sin mencionar nada más). Curioso es que Amnistía Internacional pida que EE.UU. aplique esta sanción a Egipto viendo el resultado de las campañas estadounidenses en Iraq, Afganistán, Libya o Syria o como actuó y sigue actuando -en defensa de los derechos humanos- en cárceles como Abu Ghraib, Bagram o Guantánamo.
Que aún hoy EE.UU. siga dudando si el derrocamiento de Morsi fue o no un Golpe de Estado y que haya parcialmente cancelado la ayuda que por contrato debía haber hecho efectiva está provocando que las élites políticas egipcias griten el acuerdo que tenían Obama y los Hermanos Musulmanes al mismo tiempo que declaran "Nosotros no necesitamos esta ayuda, lo que realmente necesitamos es mayor independencia nacional", como ha manifestado Mahmoud Afifi. Mientras la élite militar de momento calla pero, demostrando músculo, se despliega a lo largo del Canal de Suez dejando claro, para el que no lo tenga, que la titularidad del mismo es egipcia.