
Genéricamente podemos definir la resistencia como la capacidad de realizar un esfuerzo de mayor o menor intensidad durante el mayor tiempo posible. El ser humano posee diversas vías metabólicas para abastecerse de energìa en diferentes situaciones. Cuando un sujeto realiza una determinada actividad fìsica, se van a poner en funcionamiento las diferentes vìas metabólicas que van a suministrar al individuo la energía necesaria para poder desarrollar dicha actividad. El hecho de que entre en funcionamiento una vía u otra distinta, va a depender, fundamentalmente de la intensidad y duración de la actividad física que se este realizando.
A diferencia de los ejercicios aeróbicos, los ejercicios anaeróbicos se caracterizan por ser ejercicios en los que la elevada intensidad y su corta duración provocan la falta de oxìgeno en la sangre. Este tipo de ejercicios tienen la finalidad de potenciar los movimientos contra la resistencia o de fuerza muscular tonificando el mùsculo y potenciando su contracción. Una de las actividades que lo caracteriza es el entrenamiento con pesas. Es importante señalar que las grasas no pueden ser metabolizadas en ausencia de oxìgeno y, por lo tanto no son utilizadas durante el ejercicio anaeróbico. Entender esto es vital, ya que nos va a permitir planificar y llevar a cabo un adecuado programa de entrenamiento.
Ahora ya sabes en que área debes trabajar segùn tu objetivo. Hacer solamente ejercicio no es suficiente para obtener un cuerpo "entrenado", es necesario trabajar desde 4 aspectos; ejercicio cardiovascular, fuerza, dieta y disciplina. Con ello, no solo obtendràs grandes resultados, sino que te ayudarà a llevar a cabo todas las actividades de tu vida diaria con gran agilidad y facilidad y a mantener una adecuada composición.