Para evitar la aparición de la antiestética papada, lo mejor es tener un cuello bien tonificado. Practica el siguiente ejercicio varias veces al día:
Siéntate con la espalda recta y la cabeza erguida, inclina ligeramente el
mentón hacia abajo.Con los puños cerrados bajo el mentón, ejerce
presión oponiéndote al movimiento de éste, pero manteniendo la cara y el cuerpo inmóviles.Procura que tus hombros permanezcan abajo. Mantén esta posición durante unos cuatro segundos para luego pasar a una relajación progresiva durante dos
segundos.