Revista En Femenino
Aprovechar al máximo el tiempo es vital en la vida moderna
Cuando estás en la ducha, enjabonándote con un gel hidratante, es un buen momento para hacer algunos ejercicios.
Incorpóralos a tu rutina, y si los haces diariamente, de forma automática, sin pensarlo dos veces, poco a poco los harás con más facilidad. Asegúrate de que la ducha tenga una alfombra de goma para que no vayas a resbalar. Después de frotarte bien con una loofah, para que te active la circulación, haz estos ejercicios que fortalecen el torso, los brazos y las piernas:
1 Abre los brazos hacia los lados y ciérralos hacia ti, poco a poco, haciendo resistencia, como si te fuera difícil cerrarlos. Haz 10 repeticiones.
2 Sube los brazos y bájalos poco a poco, haciendo resistencia al bajarlos. Haz 10 repeticiones. (Puedes levantar con las manos dos botellas de champú como "pesas".)
3 Abre los brazos hacia los lados, ténsalos y haz círculos pequeños. Repite este ejercicio 10 veces.
4 Cruza los brazos, pon las manos a la altura de los codos y aplica presión, moviendo las manos hacia adentro. ¡Es un ejercicio fabuloso para brazos y pecho! Haz 10 repeticiones.
5 Ponte a "marchar" levantando muslos y piernas. Haz 10 repeticiones, descansa, y haz otras 10.