Esta semana se ha hecho público un caso en el que un niño de 15 meses ha sido expulsado de la guardería pública por haber mordido en diferentes ocasiones a algunos de sus compañeros. Por ello el bebé deberá permanecer en casa 1 semana sin poder asistir a la guardería que paga todos los meses.
Le expulsan de la guardería por morder.
El pasado lunes día 9 de Julio, una mujer de Alicante, denunciaba ante la policía que en la guardería pública a la que asiste su hijo de tan solo 15 meses de edad, la familia del pequeño no puede hacerse cargo del niño debido a sus trabajos, lo que les pone en una situación difícil.
No está muy claro quién tomo la decisión de expulsar al niño, lo que si está claro es que tanto la directora del centro como el teniente alcalde de Benejuzar que además es el concejal de educación D. Francisco Lorenzo García, estaban de acuerdo con la decisión tomada.
No suelo posicionarme nunca, aunque en este caso creo que es una de las decisiones más absurdas que he escuchado en relación a la educación en guarderías, y demuestra claramente la incompetencia de los cargos que parece ser que tienen voz y voto en temas que dejan bien claro que no tienen ni idea.
Primero esta decisión no tendrá ningún beneficio, ya que estamos hablando de un niño de tan solo 15 meses, cuando hay que tomar una medida es justo en el momento del mordisco, ya que una semana después evidentemente el niño no va a relacionar el mordisco, además que para el niño supone unas vacaciones, no un castigo, ¿alguien me puede explicar cómo va a aprender el niño con esta medida?
Lo único que se consigue con esta medida es que los padres no puedan hacerse cargo correctamente del niño, mal estar para los padres, que el bebé no esté cuidado como es debido, vamos, todo ventajas.
Las guarderías y los mordiscos.
Si alguien ha estado en una guardería sabrá que los niños de esa edad muerden, es algo habitual, y el trabajo de la guardería es precisamente evitar que unos niños muerdan a los otros y si les pillamos debemos hacerle ver que ha hecho mal y que no se debe hacer, puede ser por nuestra actitud o por medio de un castigo que no debe durar más de 3 minutos, ya que después de ese tiempo el niño, deja de relacionar el castigo con lo que ha hecho, por mucho que se lo repitamos. No es el primer niño que muerde, ni será el último ya que es un instinto natural, que si nos molestamos un poquito en la guardería podemos cortarlo enseguida.
Yo me preguntaba que, como alguien que evidentemente no tiene ni idea de lo que es una guardería y las fases de desarrollo de los bebés, puede tener potestad para tomar una decisión tan absurda, que afecta a otras personas.
Lo que me deja más tranquila es que el concejal de educación ha explicado que no se trata de una expulsión ya que no van a abrir un expediente para el niño, pero bueno solo faltaba que un niño tuviera desde el añito en su expediente académico que ha sido expulsado en la guardería, como decía rozando la absurdez.