El alcalde de Almería inunda de indignados las redes sociales tras las fuertes lluvias caídas en la ciudad

El alcalde de Almería ha vuelto a ser protagonista, esta vez en la jornada de ayer, al enfrentarse, una vez más, a sus ciudadanos por las redes sociales. Se repite el tema en particular: las lluvias e inundaciones en Almería y su falta de rigor a la realidad.
Por la mañana, el edil del Partido Popular de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, o el agente de prensa que lleva sus cuentas , un tal Jose, colgó unas fotos en las redes sociales dando a entender que la única objetividad de lo que estaba ocurriendo en la ciudad ante la lluvia torrencial que en aquellos momentos caía sobre la ciudad; sencillamente, que en las calles no pasaba nada. El tema no hubiera ido a mayores, si no llega a ser por el comentario que este escribió diciendo que las fotos que colgaban y compartían sus mismos ciudadanos en internet, resultaban ser antiguas y de otras inundaciones ocurridas en la ciudad, tildándolos indirectamente de mentirosos, aunque él quisiera darle un significado contrario.
La reacción por parte de los almerienses no se hizo esperar. Sin perder un segundo de su tiempo, y con un cabreo monumental, estos colgaron fotos de los lugares donde se encontraban en esos momentos. En ellas se veía de manera clara ciertas calles inundadas de la ciudad, las alcantarillas desbordadas en la Universidad de Almería o el túnel de la avenida del Mediterráneo hasta arriba de agua en el que se podía ver el techo de un coche y, además, el logotipo de la Policía Nacional en una esquina de la imagen. Esta resultó ser el rescate por parte de dos policías de un hombre y su hijo de 10 años que se encontraban atrapados en el coche. No sólo eso, incluso el cantante David Bisbalescribió en la red social Twitter un mensaje de asombro en la que se incluía una foto de las inmediaciones de la estación de tren de Almería, en lo que más bien parecía ser una nueva piscina municipal y gratuita.
Cada mensaje de la cuenta de Rodríguez-Comendador, a pesar de que finalizaba sus comentarios con un amable "saludos", mostraba pinceladas de un carácter chulesco hacia todo aquel ciudadano que intentaba contradecirle con pruebas reales, algo habitual en situaciones en las que la verdad y la realidad de los almerienses machacan las palabras de su alcalde.
No es la primera vez que la imagen del edil almeriense se enfrenta a este mismo problema, tanto el de las lluvias e inundaciones como el de la desinformación a sus ciudadanos. En febrero de este mismo año, en su cuenta de Facebook colgó una foto con un comentario en el que escribía que la ciudad había aguantado "bien" las lluvias que cayeron aquel el día. La foto, que en teoría debía mostrar que las calles de la capital se encontraban perfectamente tras el gran chaparrón, en el que salió a la luz la ineficacia de ciertas estructuras construidas o remodeladas antes de las elecciones municipales, resultó ser una de las calles de la ciudad de Madrid. Esto provocó la indignación y la risa de muchos de sus ciudadanos.
Pero después de la tormenta siempre llega la calma, aunque para la imagen del alcalde la calma siempre está presente. En sus cuentas de redes sociales siguen publicándose informaciones, siempre positivas y llenas de encanto, de las reuniones, festejos o visitas de Luis Rogelio Rodríguez-Comendador o de sus miembros de gobierno. Aquí no ha pasado nada hasta que la tormenta le vuelva a caer encima en forma de indignación por parte de los almerienes. Aunque él seguirá en un mundo completamente diferente, el del Partido Popular, al que viven los habitantes de Almería.