Revista Espiritualidad
Debes aprender a amar a las personas más allá de que hagan o no lo que tú quieres. Lo contrario sería manipulación, ego puro. Esa es la barrera que debes cruzar.Rendirse, aceptar, fluir.Por eso siempre has de centrarte en ti. Amarte a ti mismo y aceptarte aun no siendo capaz de hacer lo que quisieras. Este eres tú, así como eres; no tienes que hacer nada, ni cambiar nada, ni mejorar nada. ¡Sé tú! Tú no tienes nada malo.Permite que pase el amor hacia tu vida y abre el canal del amor y la abundancia. Deja de resistirte pensando que no estás bien o que te falta algo. Amate, ahora, así.¿Lo ves? ¿Ves cómo debes dejar que fluya hacia ti? Y también desde ti. Eso venimos a hacer, antenas para el flujo del amor entre el cielo y la tierra. Si cerramos los canales, no podemos serlo.El miedo es ego, es pasado. Estás aquí y ahora ante un camino nuevo, diferente, lleno de amor; del amor que tú mismo has despertado en ti. Deja de perder el tiempo con el miedo y jugar al pasado. Eso es invertir en el futuro que es el ahora. Tampoco pasa nada si en algún momento temes; no es perfección lo que se te pide, el ego sí.Ese es el ego jugando a tu juego espiritual. Pero cree que te protege. Déjalo, suéltalo pero no te enfades. Al fin y al cabo es como una mama sobreprotectora que teme que todo te haga daño. Aprende a engañarlo y escaparte de él de vez en cuando sin decirle a dónde vas.El ego también juega a tu juego espiritual y te hace creer que aún queda algo que sanar, algo que arreglar hasta llegar a... No hay nada más peligroso que creer que llegaste a algún lado pero también no hay nada más peligroso que creer que aún debes llegar a algún lugar.Todo es perfecto y todo tiene su momento. Eres abundante, siempre lo has sido. Cuando desaparece el temor, las puertas se abren. El miedo es un gran sellador.Alguien dijo una vez que todo se confundió cuando empezamos a valorar más a las cosas que a las personas y usamos a las personas para obtener cosas o meras sensaciones, que es lo mismo. Quien no respeta a otro ser no se está respetando a sí mismo y deja de despertar respeto ante los demás.El amor y el sexo no van de la mano, incluso cuando uno tenga sexo con la persona a quien ama. Y el sexo sólo, por el mero hecho de tener sexo y nada más, es un vacío que lo que hace es acentuar más y más ese vacío; como un agujero negro sin fin.El amor sin sexo, en cambio, no deja de ser amor. Quien busque el amor a través del sexo estará errando el camino... Quien encuentre sexo a través del amor seguirá teniendo amor.
Amar es soltar el control.