La llamada píldora masculina no es algo nuevo en el campo científico. Socialmente, se lleva hablando de ella desde el siglo pasado y de forma más concreta desde principios de este nuevo milenio, cuando las investigaciones comenzaron a ir cada vez más rápido. Sin embargo, hoy todavía no podemos decir que exista una píldora masculina ni cualquier otro fármaco que se comercialice para inhibir la espermatogénesis...
Gel anticonceptivo
En la era de la igualdad, la contracepción, fuera del uso de condones y vasectomías, ha venido recayendo en manos de las mujeres. Ahora, la población masculina no se verá excluida de esta labor, pues parece ser segura y eficaz una nueva píldora anticonceptiva para hombres, como constató un estudio de la Universidad de Washington. La creación de un anticonceptivo masculino ha demostrado ser todo un reto para la comunidad médica, en parte por los efectos secundarios desagradables y la falta de fondos para las investigaciones.
El undecanoato de dimetandrolona o DMAU por sus siglas en inglés fue consumido durante 28 días por un grupo de hombres, quienes no tuvieron efectos adversos frente a la fórmula. Además, hace 1 mes se empezó el proceso de pruebas con una opción en forma de gel con la misma fórmula.
Los médicos esperan que el gel, además de ser fácil de usar -se aplica en espalda y hombros- tenga aun menores riesgos que la píldora. Antes se temía que un anticonceptivo de este tipo ocasionara una baja en la libido, pero los investigadores de la Universidad de Washington aseguran que el DMAU no tiene este inconveniente. Si todo sale bien, el DMAU podría salir pronto al mercado, décadas después de la comercialización de los anticonceptivos femeninos.
La píldora
También una nueva píldora anticonceptiva masculina ha pasado las pruebas de seguridad y tolerabilidad con hombres sanos, que la usaron diariamente durante un mes, con respuestas hormonales compatibles con una anticoncepción efectiva, según investigadores de dos instituciones que han probado el medicamento. Los resultados se han presentado el pasado mes de Marzo en ENDO 2019, la reunión anual de la Sociedad Endocrina estadounidense, que se celebra en Nueva Orleans.
El anticonceptivo oral masculino experimental se llama dodecilcarbonato de 11-beta-metil-19-nortestosterona, o 11-beta-MNTDC. Es una testosterona modificada que tiene las acciones combinadas de una hormona masculina (andrógeno) y una progesterona. Los resultados sugieren que esta píldora, que combina dos actividades hormonales en una, disminuirá la producción de esperma al tiempo que preservaría la libido.
Debido a que el fármaco tardaría al menos de 60 a 90 días para afectar a la producción de esperma, 28 días de tratamiento es un intervalo demasiado corto para observar la supresión óptima de esperma. Se planean estudios más largos y si el medicamento fuera efectivo, pasaría nuevas pruebas. La anticoncepción masculina hormonal segura y reversible debería estar disponible en unos 10 años, predicen los investigadores.
Una mayoría de los hombres no descarta usar estos anticonceptivos masculinos. Una encuesta multinacional entre 9.000 hombres publicada en febrero del 2005 en la revista Human Reproduction encontró que el 55% de los que tenían relaciones estables querían probar nuevos métodos anticonceptivos hormonales masculinos si fueran reversibles.
¿Por qué tarda tanto tiempo?
Se debe principalmente a los esfuerzos realizados para evitar que las bajas dosis de testosterona, necesarias para evitar la fecundación, provoquen conflictos en el hígado de quienes decidan consumir el anticonceptivo.
Esta tarea es difícil de lograr para ambos géneros: también es complicado controlar los efectos dañinos de los anticonceptivos femeninos, relacionados con el cáncer de mama y la depresión.
La esperanza de la comunidad médica internacional radica en lograr que el consumo de estas pastillas sea completamente seguro en ambos casos. Así, la planificación familiar puede ser un asunto de dos.