La cadena de supermercados alemanes Edeka ha creado un anuncio navideño que a más de uno le tocará la patata. Y aunque ya alguno lo ha descrito como macabro, os puedo asegurar que de una manera u otra os va a conmover.
En el spot podemos ver a un abuelete que, año tras año, tiene que escuchar cómo sus hijos le dicen que no podrán ir a celebrar la Navidad con él. Ya sea por lejanía, por motivos laborales o por los críos, los cabrones le dan plantón todos los años.
Con mucha tristeza, el ancianito lo asimila mientras le vemos cenar solo una y otra vez, con una tremenda soledad que se ve reflejada en su rostro.
Y de repente, una carta llega a sus hijos: su padre ha muerto. Descubre el final de la historia en este spot que ya se ha convertido en viral en todo el mundo, y que nos deja una moraleja importantísima.