El aparador y la señora

 Para que veáis que es cierto que muchas de mis piezas salen del contenedor os voy a mostrar esto:

Iba con el coche buscando aparcamiento y de golpe me crucé con un señor arrastrando "esto". Lo hacía sin ningún tipo de miramientos, tirando de sus patitas con el mueble boca-abajo.
Visto el cariño con el que trataba al pobre trasto no dudé en que iba  a deshacerse de él, así que disimuladamente estacioné junto a los contenedores del final de la calle.
Al fin llegó el pobre hombre y lo dejó ahí, tal cual lo llevaba, del revés.
En cuanto se dio la espalda no me lo pensé y abrí el maletero, bajé los asientos calculando mentalmente el espacio del que dispongo en mi coche y cuando ya estaba a punto de cargarlo me di la vuelta y ahí había  una señora sonriente. Me puse rojo como un tomate y ella me miraba.
Traté de explicarle que eso era mi hobby, no buscar en los contenedores  si no arreglar muebles y luego mostrarlo en un blog de Internet. Creo que la convencí y sin dejar de sonreír me dio una tabla de madera que llevaba entre manos y me dijo: -Toma, esta es la balda del mueble, que por cierto es bastante antiguo.
Vista mi vergüenza fue ella quien me consoló y me dijo que todo el mundo ha cogido algo de un contenedor alguna vez (no conoce mi historial!!!).
En cuanto lo descargamos del coche se estuvo unos días en el sótano y hace una semana decidí sacarlo y examinarlo mejor:
PROS:
No tiene carcoma (bien!)
La madera estubo pintada en blanco, pero salta con solo mirar.
Tiene unas décadas (no sé decir cuantas, pero es artesanal 100%)
Su forma me encanta y me recuerda al estilo nórdico y/o vintage.
CONTRAS:
La madera es áspera como una lija del 20.
La trasera está hecha polvo, abombada y rota.
Tiene las maderas de los laterales desencajadas.

Le veis futuro???