El aperitivo francés y socializar

Serendipity

Los franceses no salen a la calle ni la mitad que nosotros, eso está claro. Pero también saben recibir en sus casas mejor que cualquiera. Continuando con mis entradas sobre la cultura francófona y aprovechando que hoy es jueves teníamos que hablar de algo muy importante: el aperitivo y socializar.
He pensado abordar este tema al revés contandoos qué cosas veo aquí y tanto me chocaron en su día por las diferencias culturales que tenemos:

- Si quedamos a las 21h00 en bar de en frente o en casa de alguna amiga...

¿Por qué hay gente que llega una hora y media más tarde?
- Cuando nos invitan a casa de unos amigos a celebrar un cumpleaños, o a juntarnos porque sí 

¿Por qué nadie lleva una botella de vino o algún detalle?

Sí estas y muchas más cosas son las que me ponían de los nervios cuando comencé a hacer tantas quedadas por aquí. Está claro teníamos otra edad y a los 25 todavía tenemos la clásica amiga de la que ya pasas porque siempre que quedamos a las 21h00 aparece a las 23h00 con toda la tranquilidad del mundo.

En Francia el aperitivo es todo un rito social, una vez a la semana nunca se falla y se hace uno. Los fines de semana que voy a ver a mis padres, siempre me reciben con un aperitivo. Aquí abajo veréis fotos de nuestros aperitivos y algunas anotaciones que he hecho.

La puntualidad es muy importante, en mi casa es el toque de queda y creo que muy pocas veces nos lo hemos saltado. Si lo hemos hecho ha habido antes una llamada a casa para avisar.
Para beber un vino blanco fresco o también se le añade un poco de crema de Cassis (Kir) y le da otro toque, otras veces Champagne... Cuando éramos pequeños tomábamos sobre todo Granadina con agua o menta con agua. He añadido también el Ricard, bebida muy francesa con fuerte sabor a anís que lo odio por encima de todo. 
Para comer, si como nosotros tenéis una fantástica cocinera en casa que lo mismo le da coger las lentejas del día anterior y hacer el pintxo innovador del siglo, nos trae nuevos sabores tras ver algo que le ha gustado en internet o bien opta por hacernos el pintxo tradicional de aquí que nos encanta: las croquetas. En nuestra casa cuando ha habido grandes aperitivos como siempre no fallamos con productos de la zona, a los franceses les encanta el Lomo (no tienen en Francia eso), anchoas, bonito, txistorra, tortilla de patata... Siempre con el punto de presentación cuidado al milímetro. 
A partir de ahí comenzamos con los Ooohhh! Ahhh!!! ¿y eso con qué lo haces? ¿qué tiene dentro esta crema? ¿me darás la receta?... Ya os lo imagináis.
Ni una cosa ni otra, a mí si algo me gusta es haber tenido la suerte de vivir estas dos partes. Los fines de semana de rabas, pintxos y vinos por Bizkaia y los buenos aperitivos de casa. Si algo voy notando quizás también con la crisis y con la edad y sobre todo con el momento de "independizarse", es que cada vez nos apetecen más los planes de "andar por casa". 
Con esto último que acabo de decir 
¿estáis de acuerdo conmigo?