Revista Cine
Esta es una de esas películas que vas dejando pasar si bien no porque se hablase mal de ella en su momento si porque al leer su descripción y alguna critica sabes lo que te vas a encontrar y entonces piensas en que ya la veras cuando tengas un rato y la dejas aparte para cuando llegue la ocasión. Y así he dejado pasar un par de años hasta que he encontrado ese rato. “The art of Getting By” es el debut en los largometrajes de Gavin Wiesen de la que también es el guionista y debo decir que se trata de un debut mas que digno.
La historia se puede resumir en su titulo original que es el arte de ir tirando. George es un adolescente apático que esta apunto de terminar su recorrido académico en el instituto sin haber hecho más de lo necesario y sin tener claro que hará después de que termine esta etapa de su vida. Es una persona solitaria y encerrada en sus pensamientos hasta que conoce a Sally y en torno a la relación con esta se van desarrollando los acontecimientos, que marcaran su futuro cercano, de estos últimos días de instituto.
Como se puede comprobar la historia no viene a reinventar un genero pero a falta de esto tenemos una historia amena y bonita cimentada en las conversaciones y pensamientos de los personajes, posiblemente estas se saldrán de lo que se espera que piense o diga alguien de esa edad pero esto se ha demostrado en otras ocasiones que puede funcionar y si no que se lo pregunten a John Hughes o Kevin Williamson. La cinta no llega a la hora y media de duración y esto puede ser un factor a favor o en contra según se mire ya que si bien no es un genero que se preste de cara al publico para que se realicen historias densas si se echa en falta una mejor finalización de la historia y al no creer que sea por falta de tiempo al menos queda en un desenlace previsible y al gusto del publico al que seguramente pueda interesar la cinta.
El trabajo de los actores seguramente sea lo que mejor acabado le da la historia. Freddie Highmore esta realmente sobresaliente interpretando a George, algunos lo recordaran de “Charlie y la fabrica de chocolate” o “Las crónicas de Spiderwick”, igual es algo pronto para aventurarse a predecir pero puede ser uno de esos niños actores que no acusen el paso a actor adulto y ojo que no digo tampoco que estemos ante el próximo Leo. Emma Roberts interpreta Sally, la chica de la historia y como buena chica de la historia tiene sus propios problemas aunque también consigue parecer una persona mas madura de la edad que tiene y por eso congenia bien con George. La sobrinisima de Julia Roberts vuelve a demostrar que conoce cuales son sus puntos fuertes y sabe como usarlos. El resto del reparto, con algunas caras conocidas para algunos, realiza una labor correcta aunque sin destacar demasiado seguramente porque el guión no se acuerda demasiado de ellos salvo en como afectan a la historia de los dos chicos.
En conclusión y como ya he dicho es la primera película de Gavin Wiesen teniendo un resultado mas que esperanzador gracias seguramente a un buen guión con grandes diálogos que ejecutan perfectamente sus protagonistas. El apartado técnico es sobrio y mas que correcto por lo que no se puede decir mucho del, no es una película para lucirse demasiado en esos campos pero tampoco la deslucen. Su única pega la ya dicha, el desenlace sirve para recordar que a pesar de que lo que importa es el camino un mal final siempre resta y aunque no se trata de un mal final si es un final previsible. Aún así tiene un publico al que encantara, así que supongo que es recomendable si aun crees en las historias bonitas de adolescentes.