El automóvil PF Sigma, diseñado por la casa Pininfarina, era un estudio sobre la seguridad en un vehículo. Su presentación se realizó en la Exposición Internacional del Transporte y de la Comunicación en la ciudad alemana de Múnich, entre el 25 de junio y el 3 de octubre de 1965.
En el pabellón de la muestra, dedicado a la seguridad en el tránsito, la casa Pininfarina exhibió el PF Sigma. Para la realización de este automóvil se usaron patentes de la propia Pininfarina, de la Casa Automovilística y del Instituto Científico. También colaboraron en el diseño de la carrocería técnicos y periodistas de la revista italiana Quattroruote.
La premisa para la construcción del PF Sigma fue basarse en la técnica más que en la estética. Por eso algunas de las soluciones a las que se llegaron. La visibilidad era total y sin reflejos, la ventilación y climatización, del habitáculo, eran racionales y con flujos de aire de bajas y altas velocidades, los asientos eran regulables y adaptables en forma anatómica, las puertas corredizas y el interior del habitáculo insonoro.
El habitáculo tenía una estructural central para resistir las colisiones. Para eso contaba con parantes de la cabina y vano motor inclinados y con gran resistencia a los impactos. En el caso de la trompa y la cola tenían sus estructuras con resistencias diferenciadas. Ahora se conoce como deformación progresiva.
En el interior del habitáculo los mandos y palanca estaban embutidos, el interior estaba acolchado, el parabrisas y la luneta eran eyectables en caso de colisión, el volante, en forma de cáliz, estaba diseñado para ofrecer la menor resistencia y los parasoles eran anti encandilamientos.
En el exterior de la carrocería las superficies eran redondeadas sin protuberancias con paragolpes de gran superficie frontal. Además estaban recubiertos, en forma parcial, con goma. Como se aprecia la mayoría de las soluciones técnicas se usan, de una u otra forma, en los autos actuales.
La diferencia es que este auto-estudio de la casa Pininfarina se realizó en el año 1965. Es decir 52 años en el tiempo. Lo que demuestra que ya se había comenzado a pensar en la seguridad activa y pasiva. Claro que no fue el único estudio de este tipo. También antes se habían estado probando otros elementos de seguridad. La fotografía, como la vieja noticia, la tomé de la revista Automundo número 15 del 7 de julio de 1965.
Mauricio UldaneEditor de Archivo de autos
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