En este último mes, he descubierto un avance fascinante en el mundo del marketing (que ya existía, pero que no estaba conceptualizado) y se llama “el Branded Content o Contenido de Marca”. Lo descubrí a través de un breve resumen del congreso Branducers (impulsado por Risto Mejide) y este avance del marketing de contenidos supone un gran cambio en la mentalidad publicitaria.
¿Quién no ha aprovechado alguna vez para irse al baño mientras interrumpían con publicidad una película o serie? ¿A quién no le molesta ver anuncios cuando se está viendo algo entretenido (sea película de cine, serie, documental, etc)? El mundo está cambiando y la publicidad no iba a ser menos. Estamos pasando de una cultura “de un bombardeo constante de anuncios” (donde las marcas no escuchaban mucho a los consumidores) a una cultura publicitaria en la que las marcas escuchan a los consumidores (debido a que ahora el cliente tiene el poder) y tratan de aportarles contenidos de valor. A los consumidores cada vez les gusta menos la publicidad intrusiva y buscan contenidos que les entretengan y les sean útiles. De este nueva tendencia, surge el Branded Content, que es cualquier contenido producido, lanzado y financiado por una marca (que puede ser a través de cortometrajes, vídeos, blogs, redes sociales, etc).
Hay profesionales que opinan que, en torno al año 2019, podría sustituir completamente a la publicidad al uso. Tengo mis dudas, pero lo que sí que tengo claro es que la publicidad al uso va a tener cada vez menos protagonismo a favor del Branded Content, ya que sus métodos son menos molestos y más efectivos para promocionarse. Además, suponen un menor coste económico para las marcas que hacer anuncios promocionales.
No olvidemos que el poder de la marca es algo emocional y, por tanto, las empresas deben trabajar en la forma de buscar un mayor “engagement” con los consumidores (ahí es fundamental acertar en las estrategias de storytelling). Por ello, los departamentos de CRM deben escuchar mucho a sus clientes e identificar aquellos contenidos que pueden ser relevantes para su mercado. Los clientes son uno de los mejores embajadores de una marca y, por tanto, hay que saber inyectar relevancia a la marca a través de contenidos originales y de valor. Hay empresas que ya experimentaron el éxito de esta nueva tendencia, como, por ejemplo, las siguientes: “The Hire” (de BMW), el famoso “Art of Flight” (de Red Bull), “Recuerdos que laten” (de Iberia), etc.
Pinche aquí para ver el vídeo