Esta semana os presento la reedición de todo un clásico por parte del luthier valenciano Bull Skull.
MARCA.
Bull Skull es Vicente Morellá, un luthier afincado en Catarroja, en Valencia, que se dedica a la construcción de guitarras, pastillas, pedales, amplificación, … este hombre lo hace todo pero siempre con una premisa, tiene que sonar a vintage.
Desde 2007 lleva desarrollando pastillas y reparando guitarras y fue en 2009 cuando creó Bull Skull como marca de todos sus productos.
Actualmente podemos ver algunas de sus últimas creaciones en manos de gente como Fernando Pardo guitarrista de bandas como “Los Coronas” o “Sex Museum”, Javier Vargas, Pere Mallén, …
CONSTRUCCIÓN.
Este instrumento, el “Bull Bass”, es el primer bajo construido por Bull Skull a petición de un cliente, se trata de un Precision bass inspirado en un fender de la década de los ’60.
Cuerpo de aliso rojo americano de una sola pieza, con dimensiones ligeramente menores que los bajos de la época, con acabado de una fina capa de nitrocelulosa en color blanco vintage. Mástil de arce americano con perfil en C también acabado en nitrocelulosa.
Diapasón de palorrosa indio y configuración con 20 trastes. Cejuela de fósil Siberia. El diseño de la pala se basa en el perfil clásico de Fender, con un retoque en sus lineas para darle la identidad propia de los productos de Bull Skull.
Los clavijeros son Schaller Classic. El puente es un Gotoh de 4 selletas y el resto del hardware se corresponde a los modelos clásicos de Fender, la configuración de los potenciómetros es volumen y tono y entrada de jack frontal en el golpeador de color tortoisse.
ELECTRÓNICA.
La pastilla está fabricada por el mismo Bull Skull, con las siguientes especificaciones: Pastilla Bull Bass P 10
Nivel de salida 20k
Hilo heavy formvar
Imanes alnico V
Degaussed
Bobinado a mano tipo Scatter wound (bobinado con un patrón “desordenado”)
El resto de electrónica se compone de potenciómetros CTS y condensador Jupiter.
CONCLUSIÓN.
El primer contacto con el bajo fue muy bueno, este es un momento muy importante ya que es en el que te transmite las primeras sensaciones de comodidad, de solidez, peso,… y te marca a la hora de valorarlo.
El tamaño ligeramente reducido del bajo y el peso de su cuerpo transmite comodidad a la hora de tocarlo, el perfil del mástil es ligeramente más fino que el de un precision de la época lo que permite una ejecución y movimiento rápido a lo largo del mástil.
El aspecto del bajo es impecable, cuidada ejecución en todos los detalles, el encastre del mástil en el cuerpo, el acabado de trastes, cejilla,… además que los colores del acabado son mi elección habitual, tengo 2 bajos con este mismo acabado.
En la prueba que le pude hacer al bajo en EGM Guitar Shop lo tuve enchufado a un cabezal Aguilar TH350 con una pantalla DB 115. Con la ecualización plana el bajo saca muy buena definición tanto en graves como en agudos, de hecho con el tono completamente abierto el sonido que resulta tira hacia el agudo con un brillo muy bonito y con mucha pegada en los graves, cosa que en pocos precision he encontrado, de forma que jugando con el tono encuentras rápidamente tu sonido.
En conclusión estamos frente a un bajo de corte clásico con una ejecución muy cuidada y muy cómodo, para ser el primer bajo de Bull Skull podemos decir que ha fabricado un gran instrumento y que estoy deseando probar nuevas creaciones en esta linea.
Si queréis seguir las últimas creaciones de Bull Skull os dejo su dirección de facebook desde donde nos mantiene al día de todo:
https://www.facebook.com/Bullskullguitars
Y por último os dejo una foto de Adolfo el propietario del bajo que me lo prestó para poder hacerle esta review.