El cambio climático y las plagas

TEMPERATURA Y PLAGAS

Cada vez más estudios, nos llevan a la conclusión de que, el aumento de las temperaturas incrementa considerablemente la reproducción de insectos y acelera su metabolismo.

En España, se ha notado mucho en las últimas décadas, en las que la temperatura ha subido en  grados, se ha producido una proliferación de plagas de insectos, como el mosquito, la mosca, la cucaracha o la avispa, incluso de especies exóticas invasoras, como el mosquito tigre o la avispa asiática, que se han adaptado a las modificaciones de los ecosistemas y a las temperaturas cada vez más tropicales,  los inviernos se han suavizado, lo que hace disminuir la tasa de mortalidad de insectos, que resisten y se adaptan a climas más cálidos.

ALIMENTACIÓN Y PLAGAS
Los científicos nos vienen alertando desde hace tiempo, del impacto del cambio climático también en los cultivos alimentarios.
Los fenómenos meteorológicos extremos, como inundaciones o sequías, producidas por el aumento de las temperaturas, bajarán nuestra capacidad para producir alimentos, cosa que se agravará, por el crecimiento de las plagas de insectos.

Según los investigadores, por cada grado centígrado de aumento, las pérdidas de las cosechas de trigo, maíz y arroz se incrementarán entre un 10% y un 25%, el aumento de 2⁰C supondría hasta 213 millones de toneladas menos al año.
El aumento de las plagas puede ser catastrófico para la agricultura en todo el mundo y afectará seriamente a la seguridad alimentaria.
Se han analizado décadas de datos sobre tasas metabólicas y reproductivas de los insectos y se ha llegado a la conclusión de que, los insectos regulan su temperatura corporal basándose en la del entorno. También la temperatura del aire afecta al consumo de oxígeno, al requerimiento calórico y a otras tasas metabólicas.

HUMEDAD Y PLAGAS
Las lluvias torrenciales también son muy propicias para favorecer las plagas. La lluvia aporta humedad al suelo para que los insectos pongan sus huevos, que a su vez necesitan absorber agua, mientras que las lluvias generan mayor crecimiento de la vegetación y eso facilita la proliferación incluso de plagas de langostas.

VIENTO Y PLAGAS
La acción del viento parece menos importante. Como aspecto negativo podemos decir que puede dificultar el vuelo de algunos insectos, pero por otra parte puede actuar como factor de diseminación muy importante de ciertos parásitos de pequeño tamaño.

LUZ Y PLAGAS
Otro factor ambiental que puede influir sobre la biología de los insectos es la duración diaria de la iluminación, en muchos casos, es el factor más influyente para determinar la entrada en diapausia o estado de letargo, de ciertos insectos.

En algunos casos, el valor del foto-período al que están sometidos los huevos de una generación tiene una influencia decisiva sobre la entrada en diapausia de las crisálidas de dicha generación. También puede influir la insolación sobre la salida primaveral, de adultos.

Con todos estos fenómenos, cada vez menos previsibles, los parámetros bioclimáticos de tipo biológico y fenológico, que conjuntamente determinan la evolución de los parásitos de los cultivos, nos impiden construir modelos y efectuar la simulación de la evolución de los patógenos y quedamos a expensas de los valores meteorológicos que se vayan dando, a partir de los datos climáticos diarios. Esto entorpece el trabajo de las Estaciones de Avisos y en general, para una correcta lucha contra las plagas.

Para combatir cualquier tipo de plagas, no dudes en llamarnos, desde Pest Control Madrid estaremos encantados de ayudarte.

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