El Campylobacter y la Shigella se transmiten por contacto sexual

Una investigación del OU Hudson College of Public Health de Dinamarca publicado en la revista Emerging Infectious Diseases, es la primera que demuestra este modo de transmisión. Las infecciones por Campylobacter generalmente ocurren cuando las personas comen pollo que no se ha cocinado completamente o cuando los jugos de las aves de corral crudas se incorporan a otros alimentos. Las infecciones también pueden ser causadas por beber leche no pasteurizada o agua que ha sido contaminada por las heces de animales infectados. 

Un brote de infecciones por Campylobacter en el norte de Europa entre homosexuales dio motivo para estudiar esa población de personas en Dinamarca. Los resultados del estudio mostraron que la tasa de infección por Campylobacter fue 14 veces mayor en los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres que en los sujetos de control. Aunque el estudio se centró en hombres que tienen sexo con hombres, los resultados son relevantes para las personas de cualquier orientación sexual que se involucran en conductas sexuales que pueden involucrar contacto fecal-oral.

Otras dos bacterias, Salmonella y Shigella, se utilizaron como comparaciones en el estudio. La salmonela se transmite principalmente a través de alimentos infectados, mientras que Shigella se puede transmitir a través de los alimentos o por el contacto sexual. La salmonela tiene una alta dosis infecciosa, lo que significa que las personas deben ingerir una cantidad significativa de la bacteria antes de enfermarse. Sin embargo, Shigella y Campylobacter tienen bajas dosis infecciosas, lo que facilita la transmisión.

Las infecciones por Campylobacter son probablemente más frecuentes de lo que muestran las cifras. Por cada persona que va al médico y es diagnosticada, se estiman que 20 personas más están infectadas. Aunque el tratamiento generalmente se requiere solo para casos graves, pueden ocurrir complicaciones, especialmente en personas que tienen el sistema inmunológico comprometido. En algunos casos, la infección puede resultar en artritis reactiva y causa dolor en las articulaciones. La infección también puede provocar el síndrome de Guillain-Barré.