El Canigú: Cachopo con setas

Hoy nos acercamos a una sidrería del barrio del Llano. Concretamente a la sidrería El Canigú, en Rio de Oro 6, a la altura de la salida del centro comercial los Fresnos por abajo.

Sidrería de barrio típica donde las haya, con un comedor amplio, menú diario y tres palos de sidra. Éramos un grupo de ocho personas y pedimos para compartir lo siguiente.

Para empezar unas Llampares de la casa que nos recomendaron. Alguna estaba un poco dura, pero en general muy ricas, sobre todo la salsita… Continuamos con un par de raciones de huevos esgonciaos, uno con setas y jamón y otro con gambas y gulas. Muy ricos ambos, aunque el de setas y jamón estaba especialmente rico, con el jamón picado, que facilita mucho repartir y comerlo. Seguimos con una ensalada de la casa. En este caso como suele ser habitual, este tipo de ensaladas es casi indescriptible ya que lleva de todo. Tenía además de la base de cebolla, lechuga y tomate, aceitunas, espárragos, chipirones, gambas, pimiento, y estaba aliñada con una especie de vinagreta y acompañado todo de una salsa, que debía de tener una base de mostaza o similar, muy rica, y reducción de vinagre balsámico de Módena. Típica ensalada de la casa que puedes encontrar en muchas sidrerías, donde parece que meten todo lo que tienen en cocina, pero en este caso muy rica.

Por último pedimos un par de cachopos que ellos llaman como españoles, que venía acompañado con una salsa de setas muy rica. Nunca había oído que lo llamaran así, pero quizá esta versión se denomine así. El cachopo no era nada del otro mundo, pero estaba bien, y la salsa es lo que le da el toque especial y lo hace realmente rico. Muy recomendable.

Otros pidieron secreto ibérico, pero lo que pude probar no estaba especialmente bueno. No sabía a nada, lo que creo que indica que la pieza era muy grasa.

De postre un buen bombón de la Ibense, delicius….

Todo esto, junto con 6 de sidra, dos refrescos, 3 aguas grandes, 4 postres y pan por 21 € propina incluida. Cafés invitados.

Me parece que estaba todo bastante rico, la atención buena, orientando y preguntándonos que tal todo, aunque hubo que pedir un par de veces que nos escanciaran sidra. Aún así recomendable. Tres lametones