¿Sabías que el estilo marinero tal como hoy lo conocemos tiene su origen en la época victoriana?
Con la expansión por mar del Imperio Británico y todos sus logros, muchos de los elementos que componen esta tendencia como la americana azul, el chaquetón o tabardo marinero y los jerseys de rayas (que años más tarde Coco Chanel pondría de moda), comenzaron a verse en la calle.
El chaquetón marinero forma un buen tándem con vaqueros de todo tipo.
Con pantalones pitillo. Aunque el pantalón slim no atraviesa por su mejor momento, combina muy bien con los abrigos cortos y con botines, calzado deportivo y plano como mocasines o loafers.
Más marinero. Consigue un navy look con dos piezas como un pantalón blanco y un chaquetón azul marino.
Si además le añades un top de rayas el look será inconfundiblemente marinero.
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También con faldas.Y mejor cortas que largas. Eso sí, en invierno lleva unas medias tupidas para que no pases frío.
Aires renovados. Pese a su carácter informal, el chaquetón marinero se reinventa para adaptarse a los nuevos tiempos.
Deja de ser una prenda de día y se mezcla con materiales sofisticados como el encaje y complementos más apropiados para estilismos formales, como los zapatos de salón de tacón alto.
Recuerda: El chaquetón marinero es todo un básico de fondo de armario. Puedes usarlo todo el año, en verano de un tejido ligero y combinado con camisetas y pantalones de algodón. En invierno con jerseys oversize y botas.
El clásico tiene solapas cruzadas y botones dorados o de estilo masculino (es una prenda unisex). Personalmente me encantan los botones decorados con anclas.
Si no quieres arriesgar utiliza la fórmula básica y llévalo de una manera informal para estilismos de día.
Se llevan de tamaño XL, aunque favorecen mucho más los que sin ser ceñidos, te definan ligeramente la silueta.