Jueves 29 de Octubre de 2015
En el pasado lejano, la gente era atemorizada y alarmada por los cometas, percibiéndolos como estrellas de largos cabellos que aparecían en el cielo sin previo aviso e impredeciblemente. Los astrónomos chinos mantuvieron extensos registros escritos durante siglos, incluyendo ilustraciones de los tipos característicos de sus colas, el tiempo en que aparecían y desaparecían, y sus posiciones en el cielo. Estos anales históricos de los cometas han probado ser fuentes de gran valor para astrónomos posteriores. Sabemos que los cometas son los restos del comienzo de nuestro sistema solar alrededor de hace unos 4.6 billones de años, y que consisten mayormente en hielo revestido con material oscuro orgánico. Se les ha denominado como “sucias bolas de nieve”. Probablemente contengan importantes respuestas sobre la formación de nuestro sistema solar. Los cometas pueden haber traído agua y otros componentes orgánicos, los ladrillos para la formación de vida, a la Tierra temprana y otras partes del sistema solar.
Como teorizó el astrónomo Gerard Kuiper en 1951, un cinturón con forma de disco de cuerpos helados existe más allá de Neptuno, donde la población de cometas oscuros orbitan el Sol en el campo de Plutón. Estos objetos helados, ocasionalmente son empujados por la gravedad a órbitas que los atraen más cerca del Sol, pasando a llamarse cometas de corto periodo. Con un periodo de menos de 200 años en orbitar el Sol, en muchos casos su aparición es predecible porque ya han pasado con anterioridad. Menos predecibles son los cometas de largo periodo, muchos de los cuales provienen de una región llamada la Nube de Oort a alrededor de 100000 Unidades Astronómicas (esto es, 1000000 veces la distancia entre la Tierra y el Sol) del sol. Estos cometas de la Nube de Oort, puden tener órbitas tan grandes que les puede costar hasta 30 millones de años en completar una vuelta al rededor del Sol. Cada cometa posee una pequeña parte congelada, llamada núcleo, a menudo de no más de unos pocos kilómetros de grosor. Los núcleos contienen trozos de hielo, gases congelados con pedazos de polvo incrustado.
Un cometa se calienta conforme se aproxima al Sol y desarrolla una atmósfera o coma. El calor del Sol provoca que los hielos del cometa se transformen en gases, por lo que la coma se agranda. La coma se puede extender cientos de miles de kilómetros. La presión de la luz solar y de las particulares solares a altas velocidades (viento solar) pueden arrastrar el polvo y gas de la coma lejos del Sol, algunas veces formando una brillante y larga cola. Los cometas en realidad tienen dos colas – una cola de polvo y una de iones (gas). Los cometas no poseen ni lunas ni anillos. Esta imagen del cometa C / 2001 Q4 (NEAT) fue tomada en la WIYN telescopio de 0,9 metros en el Observatorio Nacional de Kitt Peak, cerca de Tucson. fue descubierto en el año 2001 por el proyecto Near-Earth Asteroid Tracking (Seguimiento de Asteroides Próximos a la Tierra), sin embargo, su perihelio se produjo el día 15 de mayo de 2004. Publicado ahora en Universo Mágico debido a su belleza y la gran imagen captada po la WIYN.
Fotografía OriginalCrédito: TA Rector (Universidad de Alaska Anchorage), Z. Levay y L.Frattare (Space Telescope Science Institute) y WIYN / NOAO / AURA / NSF