Estas llamativas y bellas criaturas no son más que babosas de mar pertenecientes a la especie Jorunna parva, los dos apéndices que sobresalen de su cuerpo le dan la apariencia de un tierno conejito.
Estas dos pequeñas antenas, denominadas rinóforos, sirven a estos animales para detectar sustancias químicas de todo tipo en el agua; un órgano sensorial similar en a las papilas gustativas de otros animales. Su curioso aspecto, y gran parecido con pequeños conejos, ha hecho populares a estos animales en todas las costas del océano Índico; su hábitat natural. En estas imágenes puedes ver el curioso parecido con pequeños conejos, que se acentúa en el caso de animales de color blanco; aunque la especie tiene una amplia paleta cromática.
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