Hoy el sionismo ha manipulado los medios, distraído a los pueblos y armado a su gente para acabar con el pueblo palestino, pero no se puede decir que sus rivales son inocentes, hoy el grupo Hamas que controla Gaza usan niños y mujeres como escudos humanos, esconden armas en escuelas, sacrifican a la población civil e intimidan para seguir en el poder; En una guerra donde no hay inocentes, quizás la mejor opción para evitar que ambos pueblos se sigan cegando por el odio, sea replantearan sus creencias religiosas, pues estas son las que les ha traído desgracias no solo con su pueblo rival, sino con muchas otras culturas.
Tanto la religión judía como la islámica, son radicales, radicales de forma extrema, tan extrema que miles de veces sus creyentes son capaces de acabar con la vida de quienes piensan diferente, por lo cual la mejor forma de hallar una paz entre ambos pueblos, sería que ambos educaran a su gente, con sentido común, tolerancia, comprensión; para asi lograr a futuro un acuerdo ganar-ganar donde ambos lo cumplan, pero mientras ambos pueblos enseñen odio, violencia e intolerancia, seguirán como siempre. No se sabe cuándo será el día que la guerra entre Judíos y Árabes finalice, quizás nunca debido a factores como su arrogancia, intolerancia y odio, o quizás si algún día las nuevas generaciones de ambos pueblos le den la espalda a esas tradiciones que solo traen odios y desprecios, se logre acabar con la guerra por una tierra sin riqueza significante; Pero mientras como seres humanos más que tomar un bando sobre este conflicto, debemos tratar de analizarlo detallada e imparcialmente, aprender de el para que como personas y como sociedad, no sigamos esta línea de guerra sin sentido ni fin.
